Un ejército de 70 trabajadores del Municipio salió a la calle este lunes para continuar con la tarea que, en rigor de verdad, se inició días antes de las PASO, con el objetivo de remover la propaganda política del espacio público.
A diferencia de años anteriores, para el equipo encargado de coordinar la tarea en el centro y los barrios, la campaña esta vez dejó menos pegatinas, elemento que suele ser el que más genera perjuicio sobre el mobiliario público.
"Respecto de otras elecciones, la tendencia es la de ir a otros elementos publicitarios", indicó Luciano Marelli, director de Higiene Urbana de la Municipalidad de Rosario.
El funcionario indicó en diálogo con Radio 2, que se destinarán unos 300 mil pesos para la limpieza de fachazdas y la eliminación de pasacalles.
El objetivo es "resolver la limpieza esta semana", sumó Marelli.