El policía herido este martes a la noche en Nuevo Alberdi fue operado de urgencia luego de ser baleado y quedó en coma inducido con asistencia mecánica respiratoria. Luego de la cirugía permanecía estable y una de las primeras hipótesis que barajan las fuerzas de seguridad apunta al reciente crimen narco de un adolescente en el mismo barrio.
Según el parte del Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria, Víctor P. había sufrido una hemorragia cerebral a raíz de uno de los disparos que recibió cuando se cruzó con los tiradores cerca de Vieytes y Joaquín Suárez. Si bien había rastros de otro impacto en el tórax, el director Jorge Kilstein descartó esa lesión y agregó que la víctima sólo presentaba escoriaciones en la mano.
De acuerdo a fuentes consultadas por Canal 3, el oficial de 43 años y su compañero iban en el patrullero rumbo a un puesto fijo de custodia después de haber cumplido su horario frente al centro de convivencia barrial. En ese momento se cruzaron con un colega que estaba fuera de servicio, quien minutos más tarde les avisó que los ocupantes de un Chevrolet Aveo lo habían encerrado cuando iba a bordo de su Ford Focus. Este segundo modelo fue mencionado como uno de los vehículos empleado en el asesinato de Joel Mansilla, un chico de 17 años acribillado la semana pasada a metros del lugar.
Los uniformados salieron en busca del primer auto en cuestión y terminaron en medio de un enfrentamiento al querer identificar a quienes estaban adentro. Los agresores descartaron el rodado cerca de Ibarlucea y más tarde trascendió que el mismo tenía pedido de captura. En el sitio del tiroteo se hallaron casi una decena de vainas servidas de proyectiles calibre 9 milímetros.