El ministro de Seguridad de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, afirmó este martes que el operativo policial para el clásico rosarino se desarrolló "con normalidad hasta que se interrumpió el partido por una agresión al juez asistente".
Tras defender la decisión de enviar los grupos de combate a las tribunas para frenar los "desmanes", el funcionario alegó que era "la única manera de restablecer el orden y cuidar a los jugadores".
"Tenemos imágenes fílmicas que tomó la PDI (Policía de Investigaciones), hay personas registradas que vamos a mostrarle al club para que los identifiquen", anticipó el ex diputado provincial en cuanto al robo de la lona cobertora que impidió inflar la manga para la salida de los futbolistas de Rosario Central.
Pullaro recordó que pidieron la colaboración de funcionarios judiciales para llevar adelante una "importante investigación" en torno a los incidentes y opinó: "Creemos que la responsabilidad es compartida. No son hinchas ni son barras, son violentos".