El derrumbe de las tribunas en Villa Santa Rosa mientras se desarrollaban los Carnavales Regionales, también dejaron ver otra cara, de la que nadie habla: en medio del caos, la solidaridad dijo presente.
Fueron muchas las personas que rápidamente actuaron para socorrer a los chicos lesionados. Fueron muchos los que salieron de su silla y se pusieron a ordenar al público, asistiendo a los jóvenes que no entendían lo sucedido, auxiliando a los que habían sufrido algún tipo de contunsión. Y de ellos nadie habló.
La noticia se viralizó rápidamente, los comentarios de todo tipo se leen en todos los portales periodísticos, pero pocos son los que saben que hubo muchas personas, que en silencio, sin esperar el reconocimiento de nadie, se pusieron en acción por la simple razón de sentir empatía por lo que estaba sucediendo.
Esas personas eran bomberos voluntarios de distintas localidades que se encontraban disfrutando del espectáculo; profesionales médicos como el propio vicedirector del Hospital Regional, Dr Franco Nieto, y la secretaria de Salud del Centro asistencial Municipal de Río Primero, Dra Miryam Genaro.
Los intendentes de las otras localidades participantes que de inmediato se pusieron a la par del mandatario santarroseño tratando de tomar decisiones rápidas y correctas. Funcionarios municipales que acompañaron a las familias de los heridos. Profesionales de la salud que al irse interiorizando de lo acontecido, y sabiendo que en el Hospital sólo funcionaban las guardias de fin de semana, se acercaron para prestar sus servicios y colaborar ante un nosocomio desbordado de pacientes y familiares angustiados y consternados.
Hubo mucha gente trabajando en silencio, dejando ver en medio del caos, su empatía y solidaridad.