El Concejal Lisandro Mársico, asistió a “BioArgentina 2022″, organizada por la Cámara Argentina de Biotecnología, un espacio donde investigadores, emprendedores, startups, empresas industriales líderes y sector público se vinculan de manera efectiva.
La Cámara Argentina de Biotecnología, es una entidad que busca potenciar el rol de liderazgo de Argentina en biotecnología a nivel regional contribuyendo a la coordinación de un trabajo conjunto valioso, entre actores de diversos sectores, con el objetivo de fortalecer el posicionamiento del país en este campo.
Sus miembros lideran áreas de negocio de la industria biotecnológica múltiples y variadas. Su objetivo es contribuir a afianzar un modelo público-privado que incorpore sinérgicamente las necesidades estratégicas del país, las empresas y la sociedad en su conjunto.
En esta novena edición, los expositores se integraron en paneles referentes a agroindustria, convergencia tecnológica, salud y alimentos.
“Tuve la oportunidad de conocer y mantener una charla con Julia Fariña, quién me comentó que conjuntamente con sus dos socios armaron la startup Nat4Bio, mediante la cual desarrollaron un recubrimiento natural, de etiqueta limpia y libre de agroquímicos, basado en biomoléculas útiles producidas por hongos y bacterias, y que apunta a mitigar el desperdicio de alimentos. Concretamente se enfoca en producir una formulación aplicable a frutas (quizás a futuro también en verduras), como una delgada capa protectora que ataca no sólo las causas del deterioro físico-químico sino también y especialmente, del biológico, debido a microorganismos. Esta estrategia permitiría reemplazar a los pesticidas químicos, y proponer nuevas alternativas a otras derivadas de plantas o insectos, con la ventaja de utilizar tecnología de fermentación, la cual otorga especialmente escalabilidad, autonomía y reproducibilidad. Además, no compromete extensiones de tierra, ni utiliza recursos hídricos de forma significativa, no emplea productos que podrían emplearse para alimentación, y trata de aplicar conceptos de economía circular, valorizando sustratos alternativos y ayudando a reducir la emisión de gases de efecto invernadero. Todo ello impactaría positivamente no sólo en productores y vendedores, sino también en el consumidor final, evitando así este desperdicio de frutas que agrava la escasez alimentaria global y produce pérdidas billonarias”. informó Lisandro Mársico.
“El producto de Nat4bio está hecho de dos compuestos principales que se obtienen a través de fermentación microbiana de cepas nativas y no transgénicas. El primer compuesto es un biopolímero a base de glucosa. Este compuesto se combina con otros excipientes de grado alimentario en una cantidad muy pequeña, lo que proporciona a la película las propiedades mecánicas deseadas, tales como viscosidad, adherencia y elasticidad. El biopolímero es funcionalizado con antimicrobianos naturales de microorganismos seleccionados, lo que genera una protección frente al deterioro microbiológico. Pero además, el producto también limita el intercambio de gases que aceleran el proceso de maduración. Actualmente, la compañía tiene como objetivo que su desarrollo sea utilizado en productos cultivados en América Latina, incluida su Argentina natal, así como Chile, Perú y, potencialmente, México, pudiendo extenderse a otros mercados internacionales” comentó Fariña al edil rafaelino.