En el mes de abril, la Comisión de Comercio & Servicios del CCIRR y el equipo del Departamento Académico Rafaela de la Universidad Católica de Santiago del Estero (UCSE-DAR) llevaron adelante una nueva edición del Observatorio Comercial y de Servicios, para medir el desempeño del sector durante el primer trimestre del 2024.
En esta ocasión, se trabajó con una muestra aleatoria de 168 negocios de diferentes rubros, dedicados 134 a la actividad minorista, 1 a la actividad mayorista y 33 a la actividad mayorista y minorista. De esta manera, quedaron representados 24 barrios de la ciudad.
Volumen de ventas
De acuerdo con los datos obtenidos en el relevamiento, y considerando los efectos de la inflación, sólo el 12% de las empresas afirmó haber vendido más que en el primer trimestre de 2023. El 21% indicó que no registró variaciones y el 67% restante que vendió menos. En otras palabras, y profundizando la tendencia de mediciones anteriores, el 88% de las empresas no pudo mejorar su desempeño en la comparación interanual.
De las firmas que vieron descender sus ventas, un 27% indicó que fueron más de un 20% inferiores, un 21% que fueron entre un 10% y un 20% inferiores y un 19% que fueron hasta un 10% inferiores.
En el desagregado por rubro, hubo sectores con drásticas caídas en las ventas, como indumentaria, calzado, marroquinería, accesorios y moda en general (el 85% vendió menos que en 2023); bazar, joyería y relojería (el 86% vendió menos que en 2023); y perfumería, cosmética y farmacia (también el 86% vendió menos que en 2023).
Estos resultados están en línea con las mediciones de la Confederación Argentina de la en Mediana Empresa (CAME), cuyo Índice de Ventas Minoristas Pymes de marzo arrojó una merma interanual del 12,6%. Al respecto, la entidad que nuclea a las pymes argentinas expresó que “los comercios están atravesando meses delicados, con pocas ventas y subas de costos. Especialmente en marzo fue notorio el incremento de precios en los servicios públicos. Aquellos locales más intensivos en el uso de energía, por ejemplo, como alimentos y bebidas, vieron saltar las cifras en sus boletas de luz” y destacó que “las familias vienen cuidando fuertemente sus gastos incluso cuando hay opciones de pagos con tarjetas o en cuotas. Hay incertidumbre sobre cuánto durará la recesión y por eso prevalece la precaución al momento de comprar”.
Esta perspectiva coincide con lo que, ya en febrero, había adelantado la Cámara Argentina de Comercio y Servicios (CAC), en relación a la evolución del consumo de bienes y servicios por parte de los argentinos: “Con un ingreso nominal que continúa exhibiendo variaciones mensuales por debajo de la inflación, el acceso a bienes y servicios por parte de los hogares se ha visto notoriamente deteriorado en los últimos meses.”
Medios de pago
Dentro de los medios de pago más elegidos por los clientes se destacan las tarjetas de crédito y débito, con un 34% (28% en la medición anterior). Le siguen contado, con el 31% (41% en la medición anterior); crédito personal, con el 15% (7% en la medición anterior); otras billeteras digitales, con el 14% (6% en la medición anterior); otros medios de pago, con el 3% (12% en la medición anterior); cheques, con el 3% (también 3% en la medición anterior); y Billetera Santa Fe, con el 0,5% (3% en la medición anterior).
En lo que respecta específicamente al programa Cuota Simple que lanzó el Gobierno nacional para reemplazar al programa Ahora 12, sólo el 39% de los encuestados indicó conocer la iniciativa y estar adherido. Un 31% lo conoce pero aún no se sumó, y un 26% no sabía de su existencia al momento de responder la encuesta.
Entre los comercios adheridos, el 39% señaló que el impacto en las ventas fue positivo, el 26% que el impacto fue regular y el 27% que fue bajo.