Lautaro Martínez recibió la merecida ovación el viernes en Bahía Blanca. Miles de fanáticos, se acercaron al balcón del Teatro Municipal para mostrarle su cariño al futbolista formado en Liniers. Antes de saludar al público, el “Toro” fue reconocido como Ciudadano Ilustre y brindó una conferencia de prensa.
Del diálogo con los periodistas surgieron varios conceptos y anécdotas. Entre ellas la referida a los penales.
Pese a no haber tenido un gran Mundial, Lautaro tuvo su momento como protagonista central ante Países Bajos, cuando le tocó patear el quinto penal, el decisivo que le dio a la Selección Argentina el pase a la semifinal. Paso fundamental para la obtención del título.
La dramática final ante Francia finalizó con la definición por penales que no necesitó el quinto. El bahiense era el designado, pero Montiel sentenció el pase a la gloria eterna al convertir el cuarto, el que desató la euforia contenida durante 36 años.
Consultado sobre la historia de los penales, Martínez dijo que ante Países Bajos. “Estaba tranquilo, la verdad. Estaba muy tranquilo y confiado”, aseguró.
Sobre la posibilidad de haber tenido que patear el quinto Lautaro aseguró: “Si me tocaba patear el quinto penal, pateaba como mi viejo”, el puntaltense Mario “Pelusa” Martínez, multicampeón en la Liga del Sur con Villa Mitre y Liniers y protagonista de dos momentos históricos de la Liga del Sur, el primer ascenso al Nacional “B” de Villa Mitre y el la hazaña de Rosario Puerto Belgrano al ascender al Argentino “A”.
En aquel ya lejano 2004, el hoy Campeón Mundial formó parte de las infantiles del tricolor y estuvo presente en cada partido que Rosario jugó como local en lo que fue la campaña más gloriosa de historia.
Si bien “Pelusa”, erró un penal durante el partido de vuelta ante Sporting al resbalarse al momento de ejecutar, tuvo su revancha en la siguiente eliminatoria, cuando pateó el primero ante Santamarina, a la derecha del arquero, arriba para iniciar el camino de la clasificación. Lautaro patearía al mismo lugar 18 años después, en cuartos de final de un Mundial.
Lautaro hubiera pateado como lo hacía “Pelusa”, dijo. Pero ya lo había hecho en su momento de gloria en el Mundial, y pateó como lo manda su ADN.