El árbitro Gabriel Cortinez sigue recuperándose del ataque que recibió por parte del jugador de Sporting de Santo Pipó, Luis Maciel. El futbolista noqueó al referí luego de este lo expulsara el domingo pasado durante un encuentro por la Liga Posadeña contra Bartolomé Mitre. El deportista dijo sentirse arrepentido, pero reaccionó ante un insulto racista por parte del colegiado.
Cortinez relató que a partir del golpe que recibió perdió la noción de tiempo y espacio. "Cuando me despierto pensé que estaba en la cancha de Guaraní", contó. Después de unos minutos logró recuperar la memoria, aunque tuvo que ser trasladado al hospital Madariaga. Cerca de las 23:30 horas de ayer fue dado de alta, aunque todavía siente dolor por el golpe recibido.
El presidente del club de Santo Pipó, Guillermo Romero explicó: "Hablé con el jugador para pedirle una explicación de lo sucedido y me manifestó su arrepentimiento, pero también me a dicho que su reacción fue producto de un insulto de racismo del árbitro a su persona". Ante los hechos de violencia Romero manifestó: "Nos solidarizamos con el juez Cortinez por la agresión y nos ponemos a su disposición por cualquier cosa que necesite".
El árbitro apenas puede modular, ya que el golpe de puño de Maciel fue directo en la mandíbula. "No me acordaba ni que hacía, ni de qué trabajaba o quién era. Estaba muy aturdido", confesó Cortinez. Quien también aseguró que realizará una denuncia por agresión contra el jugador de Sporting.
Por su parte, el presidente de Sporting agregó: "No estoy de acuerdo con la violencia, queda muy mal. No se justifica por nada. Al jugador ya le se le comunicó que queda suspendido por tiempo indeterminado del club". Sin embargo reiteró: "El fútbol no se puede manchar con lo que pasó". Según publicó El Territorio.