Un instructor de gimnasio se encontraba realizando actividades deportivas ayer a la tarde por los senderos de la Costanera Oeste de Posadas, cuando encontró en una bolsa a una beba recién nacida, que tenía un puñal incrustado en el dorso y otras heridas de arma blanca, pero que aún respiraba. El joven identificado como Diego Sebastián Penayo cargó a la bebé y la llevó hasta el Comando Radioeléctrico Zona Oeste.
La acción del hombre fue clave para salvar la vida de la recién nacida, ya que inmediatamente la bebé que todavía presentaba signos vitales, fue llevada por personal policial al Hospital de Noeonatología, para atención médica. Los médicos que lo atendieron diagnosticaron que la beba tiene dos días de vida y presenta: "arma blanca incrustada en el tercio superior del dorso. Los RX no impresiona compromiso pulmonar. Presenta otras heridas cortantes en el tórax".
La pequeña fue sometida a una cirugía, en la que le extrajeron el arma. "La bebé en estos momentos por suerte está estable y confiamos, más allá de que el pronóstico esté reservado, en que pueda llegar a salir adelante", indicó el Dr. David Halac, director del hospital Materno Neonatal. "La bebé entró hipotérmica, un poco deshidratada y llorando, esto último es bueno porque son signos vitales, inmediatamente se la operó", agregó.
Por otra parte, efectivos policiales de la dependencia se constituyeron en el lugar del hallazgo a efectos de preservar la zona. Tomó intervención del caso, el Juez de Instrucción 1 de Posadas, Marcelo Cardozo, quién ordenó el inicio de las investigaciones del caso.