Tras conocerse que la jueza federal María Eugenia Capuchetti exigió ampliar la declaración indagatoria de Fernando Sabag Montiel, según los investigadores, el atentado contra Cristina Kirchner fue planificado por el acusado y su novia.
Tal como informó Clarín, medio que pudo acceder al avance de la investigación, luego de los peritajes a los teléfonos móviles de los implicados, se pudo ver fotos en las que se lo ve al brasilero posando con el arma que utilizó para el intento de magnicidio.
Por otra parte, se la ve también a Brenda Uliarte, su pareja y también detenida, con una pistola en la cintura.
Cabe destacar que esta información es importante ya que la joven había dicho que no sabía que Montiel tenía un revolver.
En las últimas horas, trascendió que el fiscal federal Carlos Rívolo solicitó la ampliación a indagatoria, aprobada por Capuchetti. En estos momentos, se analiza que la declaración sea después del interrogatorio a su novia, la cual será entre las 16 y las 18 horas de este martes.
Los resultados de los peritajes del arma
Tras los peritajes realizados al arma con la que se intentó atacar a la vicepresidenta Cristina Kirchner el jueves pasado en su regreso a su hogar en el barrio porteño de Recoleta, la justicia determinó que el ADN encontrado en la pistola corresponde a Fernando André Sabag Montiel.
El brasileño de 35 años permanece detenido por el ataque y a fin de la semana pasada se negó a declarar. Se lo imputa por “intento de homicidio agravado”, por lo que podría estar recibiendo una pena de entre 15 a 22 años de cárcel.
Las pericias efectuadas son sobre la pistola Bersa calibre .32. En ellas se determinó la presencia de material genético que pertenece al imputado.
La Justicia le solicita a su vez a Gendarmería que realice las investigaciones pertinentes sobre el celular de él. La novia de Sabag Montiel estará declarando este próximo martes y ya se le retuvo los teléfonos celulares a cuatro amigos del agresor.
Los rastros de ADN hallados están presentes en el gatillo, la empuñadura y también en la corredera del arma. Si bien la bala no salió al ser gatillada, la pistola estaba cargada con cinco balas y en condiciones de ser disparada.
En los allanamientos realizados en su domicilio, encontraron 100 balas que coinciden con el arma utilizada, dispuestas en dos cajas de 50 unidades cada una, además de una computadora y un teléfono celular.
Pero la Justicia tropezó con un inconveniente que enlentece la investigación: el celular de Fernado Sabag Montiel había sido “reseteado” por lo que resulta inaccesible poder establecer qué contactos mantuvo el agresor antes de atentar contra Cristina Kirchner.
