Un nuevo episodio de denuncias y sospechas rodean a Nahir Galarza, después de que acusara a su padre por el crimen de Fernando Pastorizzo. Esta vez, su abogada, Raquel Hermida Leyenda, denunció que hay “una persecución” contra su clienta.
La joven acusada por el asesinato de su pareja en 2017 habría recibido el hostigamiento por parte de las autoridades, debido a que hubo un cambio de look que habría sido el desencadenante para un castigo en la cárcel donde está cumpliendo la condena.
Leyenda asegura que Galarza habría pedido permiso para que asista su madre para que “le corte el pelo y le haga color”. Sin embargo, las condiciones con los guardias se pusieron distintas cuando notaron que estaba diferente. “Allanaron su celda, levantaron el techo y le pusieron una custodia de tres oficiales armados para cruzar a estudiar su licenciatura en Psicología”, remarcó la letrada.
La defensa marca que la joven conserva un bajo perfil desde hace ya varios meses, que de ninguna manera pretende alterar. “Trabaja desde las 8 y asiste no solo a la Facultad sino también a varios cursos”, señaló la especialista en casos de violencia de género.
Para la letrada, esto no es más que “una persecución” por parte de los agentes penitenciarios, cuando ella solo “está esperando la resolución de la Corte Suprema y la posibilidad de acceder a un nuevo juicio”. Y agregó: “Nahir no quiere fugarse, solo sueña con un nuevo juicio que condene a su padre”.
Nahir Galarza denunció que el asesino de Fernando Pastorizzo fue su papá
La joven aseguró que su padre, Marcelo Galarza, fue el autor del crimen y apuntó contra los fiscales y abogados defensores que estuvieron en el proceso judicial. “Yo no lo maté a Fernando, fue papá. Quiero que acuses al verdadero asesino y a los corruptos que taparon lo que pasó de verdad aquel día”, acusó el pasado 7 de enero a casi 5 años de crimen.
Además, pidió que se involucren al fiscal de la causa, Sergio Rondoni Caffa, y al abogado Marcelo Reborsio, el primero que defendió a Nahir durante el proceso penal. Hermida Leyenda asumió la defensa una vez que se completó la sentencia.