Este lunes en "El diario de Mariana", programa del El Trece que conduce Mariana Fabbiani comenzaron a mostrar la entrevista que realizaron en exclusiva con Nahir Galarza el pasado jueves. La joven habló de como vivió el proceso judicial, el día del crimen entre otras cuestiones.
En el inicio de la entrevista Galarza remarca que ella nunca había agarrado un arma y que su padre, policía, no le había enseñado a usarla pero si que convivían con estos elementos. "El confiaba en nosotros, su familia. Nosotros desde chico sabíamos perfectamente que las cosas del trabajo de mi papá no se tocaban", sostuvo y señaló que su padre se sintió culpable por haber dejado el arma en ese lugar.
Además sostuvo que se fue con Fernando Pastorizzo porque "estaba amenazada" y aseguró que ella no publicó la imagen de ellos dos con un mensaje para el joven luego de que se confirmara su muerte: "A mi me secuestraron el celular a las 8 de la mañana, es imposible que haya sido yo", dijo y comentó que sintió impotencia por lo que esta publicación desencadenó.
"Tome conciencia tres meses después de que Fernando había fallecido", sostuvo y dijo que se acuerda el momento porque fue cuando recibió contención psicológica. "En un principio no me dejaban tener atención psicológica, pero la psicóloga tuvo la idea de venir a verme en horario de visita", contó detallando que una de las dos horas que podía ver a su familia se la dedicaba a la profesional. "Ella fue la que me ayudó y me hizo entender que Fernando había fallecido", señaló.
Al ser consultada por su declaración durante el juicio, Nahir sostuvo que "cambiaría todo": "Creo que en ese momento no estaba en condiciones de declarar porque no tenía la mente clara. Estaba sola, encerrada y se me juntaban todos los pensamientos y recuerdos. Creo que no fui clara en las cosas que me pasaron", sostuvo.
Además remarcó que para ella "fue muy injusto lo que hicieron conmigo tanto social como mediaticamente porque creo que me condenó la sociedad y no la Justicia". "Tenía esperanza de que la Justicia actuara objetivamente pero se dejaron llevar por la sociedad y los medios", dijo.
Al mismo tiempo sostuvo que la declaración de sus dos amigas hubieran cambiado las cosas porque ellas conocían en detalle su relación con Pastorizzo, aunque reconoció que "por mas tóxica que haya sido la relación, creo que nadie puede decidir sobre la vida de otra persona. Por eso me siento culpable".
A la espera de que Casación de su respuesta en la causa, Nahir reveló que nunca contó lo que de verdad pasó por miedo pero no detalló que es eso que no contó ya que espera que la Justicia defina la condición de su condena para hacerlo.
El fallo de la Justicia y su causa fueron el factor determinante para que la joven cambie de carrera: pasó de estudiar Derecho a Psicología. "Cambié porque me sentí decepcionada de la carrera que había elegido. Creo que la Justicia no siempre es lo que debería", sostuvo y agregó: "Quería defender a la gente y hacer Justicia pero por más que sea la mejor abogada del mundo, a veces las cosas no son lo que tendrían que ser".
En cuanto a lo que ocurrió entre Pastorizzo y ella, sostuvo que tuvo la culpa por "no haber cortado todo desde el principio. Tendría que haber hablado antes" de la relación tóxica y solo se siente responsable de "no haber cortado la relación cuando tuve que haberlo hecho, de no haber hecho la denuncia, de no haber hablado antes".
"En el momento no tenía noción de la gravedad de las cosas. Hoy ni yo mismo entiendo porque soporté todas esas cosas", sostuvo y agregó: "Me aguanté tanto porque si hablaba sabía que iba a salir más perjudicada mi familia que yo. A mí me pueden decir cualquier cosa pero mi familia es sagrada".
Fabbiani le preguntó sobre la relación que mantenía con su familia y puntualmente con su padre y Nahir sostuvo: "Por mi papá haría cualquier cosa", a lo que la conductora repreguntó si llegaría a perjudicarse en la causa a pesar de que eso signifique condena perpetua, la joven fue contundente en su respuesta: "Sí".
En cuanto a su vida actual, contó que sigue siendo "normal" y que cuando llegó algunas compañeras estaban distantes hasta que la conocieron. "Uno acá hace su vida normal, la única diferencia, que es la más importante, es la libertad", explicó y admitió que eso le "pega mucho".
"Si me pongo a pensar en la condena, caigo en una depresión. Por eso trato de seguir viviendo mi vida", aseguró y admitió que no hace planos a largo plazo.
Si bien nunca mencionó el asesinato de Pastorizzo, ella afirmó: "Estoy acá por homicidio" y aseguró: "Si no hubiera pasado lo que pasó, sería yo la que estaría del otro lado con la diferencia de que el caso no habría tenido difusión. Sería un nombre más en el cartel de 'Ni una menos'"
En cuanto a la pena que pesa en su contra, sostuvo que esperaba recibir "la condena que me correspondía, la que era la justa". Al ser consultada sobre cual era esta, respondió: "Supongo que la de homicidio, porque Fernando no era mi novio y a mi me caratularon la causa como homicidio agravado por el vínculo".
En la última parte de la entrevista, la joven contó que se lleva bien con sus compañeras pero que en su pabellón hay "problemas de convivencia" pero que son normales, aunque puntualizó en una de las mujeres que comparte celda con ella: "Tengo problemas con ella desde hace rato. Es lesbiana, funcionaria, policía y durante mucho tiempo estuvo atrás mio".
Si bien contó que en un principio eran amigas, "después ella se empezó a confundir y le aclaré que estaba todo bien pero que a mi me gustan los chicos. Se enojó y se cortó la relación". Ese mismo día Nahir la habría denunciado por abuso y acoso.
Ante esta situación, comentó que pidió ser trasladada a un pabellón común ya que en el de seguridad están 22 horas encerradas, pero que aún no tuvo respuesta por parte de la autoridad del Penal femenino.
