Renovada a nivel de artefactos, esta casa en Luján de Cuyo está alimentada por energía solar. Con un panel fotovoltaico se da energía a la vivienda y a todo lo que necesite corriente eléctrica, mientras que el termotanque solar provee de agua caliente.
Ésta no es la primera casa que usa esta tecnología, existen varias personas que ya eligen las energías sustentables como forma de vida, pero sí es la primera abierta al público. El objetivo de los creadores de este emprendimiento es poder ofrecer a los clientes o interesados en las energías renovables, una experiencia de cómo se ve y funciona una casa con energía solar.
El sistema novedoso que tiene instalado este hogar es un sistema fotovoltaico on grid, esto hace, que inyecte energía a la red de la casa cuando se requiere y haya sol. Además, incluye un sistema de monitoreo que permite controlar ahorros y producción de energía al alcance de una app.
Los creadores del proyecto son los integrantes de Solhé, una empresa nacida en Mendoza, por el proyecto de tesis de Nicolás Giorlando y que luego fue posible de realizar gracias a socios inversores. Desde hace años la empresa se dedica al diseño e instalación de sistemas integrales de energía solar, ofreciendo diferentes alternativas tanto para viviendas, como para empresas.
La Energía Solar
La Provincia de Mendoza, mediante la Ley 9084, adhirió a la Ley Nacional de Régimen de Fomento a la Generación Distribuida de Energía Renovable destinada a la Red Eléctrica Pública, y además declaró de Interés Provincial los Recursos de Energía Distribuida de las actividades de Generación Distribuida, Almacenamiento Energético y Gestión de la Demanda.
El Gobierno provincial, mediante el Decreto 404, estableció los lineamientos generales de implementación del Programa de Modernización del Sector Eléctrico de la Provincia de Mendoza, colaborando así a la generación de energía limpia.
La energía solar no emite gases de efecto invernadero, por lo que no contribuye al calentamiento global. Se ha demostrado que las tecnologías renovables son lo más eficiente en la lucha contra el cambio climático.
Al contrario que las fuentes tradicionales de energía como el carbón, el gas, el petróleo u otras, cuyas reservas se acaban con el tiempo, la energía del sol está disponible en todos y se adapta a los ciclos naturales, por esto es tan importante empezar a conocerla y usarla.