Según María Manucha, martillera pública del Gobierno de Mendoza, dio como ejemplo la subasta realizada la semana pasada, "cuando se subastaron 5 motos de Tránsito de Mendoza y 22 secuestradas por las Municipalidad de Godoy Cruz y Capital. Se vendieron todas a un promedio de $4.000 las de menor cilindrada y las más grandes se vendieron a $8.000", aseguró, en relación a los remates de automotores que se encuentran secuestrados en la playa San Agustín, que en total suman unas 18.000 motos y 31.000 autos.
Manucha explicó que las que se rematan son las que fueron secuestradas por alguna infracción de tránsito y que luego de un tiempo no son reclamadas por los dueños. Esto debido a que muchas veces es más barato comprarse una nueva que pagar la multa y ponerla en condiciones reglamentarias.
Para acelerar el desprendimiento de estos rodados los municipios y el Gobierno se valen de la ley 8.018, específica para los remates de todos los bienes secuestrados por infracción de tránsito. La norma rige desde hace 4 años.
También la nueva Ley de Tránsito habilita al Estado para que decida qué hará con una moto o auto confiscado, que lleve más de 6 meses en la playa San Agustín.