"Existe un mandato partidario, y ese mandato generó un compromiso por escrito, firmado por todos los diputados del bloque, y es que se rechace el proyecto de la ampliación de la Corte. Si esto no se cumple, que no quepa la menor duda de que habrá consecuencias", remarcó el presidente del Partido Justicialista de Mendoza, Omar Félix en relación a los 6 diputados que le dieron vía libre a la última etapa de la reforma judicial impulsada por el gobernador Alfredo Cornejo: la ampliación de las Suprema Corte de Justicia.
Los intendentes peronistas serán los encargados de dialogar con los diputados en cuestión, intentando que reflexionen y que den marcha atrás antes del 25 de abril, cuando Diputados sesione por última vez antes de la apertura de sesiones ordinarias.
Qué puede ocurrir si el kirchnerista Lucas Ilardo, los diputados más cercanos a Ciurca (Sonia Carmona, Jorge Tanús, Omar Parisi, Alberto Roza) y el azul Carlos Bianchinelli (que responde a Alejandro Bermejo, pero según dijo en la cámara, en este tema tiene libertad de acción) no se cuadran, y votan a favor de la ampliación de la Corte. La respuesta que dio Félix es que habrá sanciones.
De ser así, el tema pasará al Consejo Provincial del PJ, que decidirá si enviarlo al Tribunal de Disciplina, y es este organismo el que puede tomar la decisión de convocar al Congreso Partidario.
Este último es el que tiene la potestad de sancionar y hasta de expulsar a sus miembros. Es decir, que los diputados que abrieron el diálogo con Cornejo pueden ser expulsados por desoír la decisión del partido.
El miércoles pasado y en conferencia de prensa, varios de los diputados que participan en este grupo dijeron que votarían a favor de que el proyecto tomara estado parlamentario, es decir, dar posibilidad al tratamiento, pero manifestaron que aún no habían tomado una decisión por sí o por no acompañar.
