Los trabajadores del Turf de la provincia se manifestaron esta mañana en el Acceso Este, exigen que se habiliten las carreras de caballos y se acelere el pedido del Gobierno a la Nación.
El hipismo sigue cerrado por el COVID-19, la cual impide trabajar a cientos de personas que este miércoles se convocaron junto a sus familias para reclamar por su trabajo.
El corte estuvo controlado por la policía de la provincia y la manifestación se llevó a cabo pacíficamente. Los trabajadores vieron en el pedido de habilitación de esta actividad por parte del gobernador Rodolfo Suárez a la Nación como un "manotazo de ahogados". Por lo que salieron a la calle los jockeys, cuidadores, entrenadores y personal vinculado pidiendo urgente que se destrabe la situación a la cual consideran insostenible.
Suárez envió una carta al Jefe de Gabinete, Santiago Cafiero, señalando que la actividad estará bajo la "estricta supervisión" del Instituto Provincial de Juegos y Casinos y que habrá un "seguimiento de la autoridad sanitaria local mediante los protocolos pertinentes". En tanto que ayer se difundió el protocolo de trabajo que esperan ser autorizado por la Casa Rosada.