La llegada a la guardia de un niño que fue atropellado el pasado martes por la tarde, y del cual no se tenía ninguna identificación, salvo el tatuaje de una cruz, y a casi 24 horas del accidente ocurrido en la Costanera, en Guaymallén, ningún pariente se había presentado en el centro asistencia, trajo mucho inquietud al Hospital Notti.
El menor de edad estaba en la sala de terapia intensiva como un NN con traumatismo de cráneo. Pero este miércoles al mediodía finalmente apareció la mamá del jovencito, ya que se trata de un adolescente de 15 años.
Fuentes del hospital informaron que el chico permanecía aún este jueves en terapia intensiva ya que padece un severo traumatismo craneano con pérdida de conocimiento, pero va evolucionando favorablemente y posiblemente en pocos días podría pasar a sala común, o sería trasladado a otro nosocomio, ya que por su edad no le corresponde el Notti, que es especializado en pediatría y sólo recibe como excepción a adultos con Covid-19.
La mamá del quinceañero habría comentado a las autoridades del hospital que su hijo cumplió esa edad en agosto, y que tuvo problemas para ubicarlo, ya que los chicos con los que estaba en el momento del incidente eran compañía eventual, no conocían bien a su familia y tampoco sabían bien su nombre.
El accidentado fue llevado al Notti por la ambulancia del Servicio de Emergencia Coordinado (SEC) pensando que era un niño, luego de atenderlo sobre la calzada de la calle Gobernador Videla (Costanera), del lado de San José. El chico se encontraba circulando por calle Catamarca (Ciudad) hacia el Este con una pequeña bicicleta junto a otros chicos, y al cruzar el zanjón, en la mano que va al Norte, el semáforo cambió, algunos amigos retrocedieron, y él no pudo, por lo que fue impactado por una camioneta.