Este domingo, el participante mendocino de "Bake Off Argentina, el gran pastelero" quedó fuera de la competencia y fue despedido con gran emoción de parte de sus compañeros. Gerardo no logró una buena performance y fue eliminado por el jurado.
La final del programa se acerca, y las exigencias son cada vez mayores. Es por eso que los participantes fueron sometidos a tres pruebas totalmente diferentes: dos creativas y una técnica. Fue en esta última que Gerardo estuvo más complicado, y su salida fue prácticamente un hecho en el momento en el que presentaron de los platos.
Es que el pastelero mendocino siguió todos los pasos para armar una torta clásica de la pastelería francesa, un fraiser (de fresas), que requería un cuidado extremo, pero el resultado no fue el esperado. Es que la torta de Gerardo se desmoronó por una mala gelificación y el jurado no aceptó un error de esa envergadura a esta altura de la competencia.
Si bien, tanto él como la conductora de Bake Off, Paula Chaves, celebraron que la torta estuviera "perfecta" al momento de quitarle el molde, luego esta se desmoronó. Gerardo intentó salvarla colocándola en el freezer con la esperanza de que el frío la mantenga íntegra y hasta recibió la ayuda de sus compañeras, pero nada de esto fue suficiente.
"Le saqué el acetato y a los minutos, la torta se cayó, se hizo de goma", explicó el mendocino. Su torta inspiró a que los usuarios de las redes le dedicaran decenas de memes a quien bautizaron como "Llorardo".
El mendocino se hizo conocido por expresar sus sentimientos a lo largo de los programas, y este último no fue la excepción, ya que una vez más Gerardo se emocionó al presentar un plato. Luego de su frustración con la tarta de fresas, intentó reivindicarse con una reversión del clásico lemon pie.
El pastelero amateur hizo la tarta de limón y merengue en forma de un puente. "Hice un puente con los ingredientes de un lemon pie porque pensé que une el amor de mi familia por el amor a la pastelería. Es el postre preferido de mi mamá y mi papá, asique por eso está acá", dijo entre lágrimas.
Sus esfuerzos fueron en vano, y Gerardo pasó junto a dos de sus compañeras, pero fue él el elegido para abandonar la carpa. El participante había regresado luego de un repechaje y esta fue su segunda eliminación.
"Sé que la pastelería es exacta, sé que todo está medido y calculado pero la pastelería nunca me va a decir la cantidad de amor que le puedo poner a mis preparaciones. Todas, algunas bien hechas y otras mal, tuvieron mi amor. Para nosotros, que nos dedicamos a esto, tener el delantal con tu nombre es buenísimo", dijo Gerardo antes de retirarse.
"No me gané nunca el delantal celeste, pero sí me gané el delantal de mis amigos, ese es el que me llena de emoción y que me hace ser el pastelero amateur que quiero ser", cerró.
