En sólo un año unos 2 mil quioscos de Mendoza cerraron sus puertas, según datos de la UKRA (Unión de Kiosqueros de la República Argentina). Según los empresarios y cámaras los principales motivos han sido el incremento de la luz y de los producto, sumado una caída en la demanda del más del 30%.
Según publicó hoy diario Los Andes desde la Federación Económica de Mendoza (FEM) en la provincia hay cerca de 4.000 quioscos, ubicados en el Gran Mendoza, y otros cientos -que no están registrados- en los departamentos periféricos. Sin embargo a comienzos del 2016, se localizaban más de 6 mil locales.
La apertura y cierre de éste tipo de pequeños negocios se produce por la pérdida de empleo y con la indemnización que cobra decide abrir éste tipo de negocios o algún tipo de almacén. "Por lo tanto es bastante cíclico e informal, aunque es una alternativa ante la crisis", explicó Adrián Palacios, presidente de la Ukra al matutino mendocino.