Hace 30 años, Vicente empezó a recorrer las calles de centro mendocino vendiendo café. Durante todos estos años su rutina fue más o menos la misma, ignorando las inclemencias del tiempo. Se levantaba de madrugada, hacía el café, llenaba sus termos y salía con su carrito a ganarse el pan diario.
El viernes se detuvo en un negocio de envases descartables para comprar vasos. Entró al local y cuando salió se habían llevado su carrito con 10 termos. Vicente no pudo más que llorar de impotencia y desesperación.
Una chica que vio lo que sucedía, Yanira Tucci, se conmovió ante semejante injusticia y recurrió al grupo Mendocinos en Alerta para pedir ayuda. Contó lo sucedido y dijo que si alguien había visto el carrito o sabía dónde estaba, por favor avisara.
El fin de semana, la solidaridad de los mendocinos hizo que Vicente pudiera reunirse con algunas donaciones como café, azúcar y termos. Este martes Vicente volvió a las calles a vender café.