El juicio oral por abusos sexuales cometidos en el Instituto Próvolo de Mendoza comenzará el lunes 5 de agosto, a las 9.30. Hay catorce imputados, entre los que se encuentran los curas Nicolás Corradi, Horacio Corbacho, la monja japonesa Kosaka Kumiko, y la ex representante legal, Graciela Pascual, confirmaron fuentes judiciales este lunes.
Se trata de los casos de abuso sexual a niños hipoacúsicos en el instituto de Luján de Cuyo, y por la misma acusación también están en prisión el monaguillo Jorge Bordón y el jardinero Armando Gómez .
A los tres alojados en cárceles y a los tres que se les concedió prisión domiciliaria (Corradi, Kumiko y Pascual) se suman otros ocho ex empleados en el listado de imputados, entre ellos la también monja Asunción Martínez y cuatro ex directoras del Próvolo.
Esta causa ya tiene un condenado, ya que en septiembre de 2018 en una audiencia preliminar, se produjo la confesión de uno de los imputados, el empleado administrativo y monaguillo Jorge Bordón (50), por lo que se llegó a un acuerdo entre su defensa y la fiscalía, procediéndose a un juicio abreviado, en el que el imputado recibió una condena a 10 años de prisión.
Bordón reconoció su culpabilidad como autor de los 11 hechos de abusos sexuales agravados y corrupción de menores por los que se encontraba imputado, y de esa manera en el Segundo Tribunal Penal Oral, presidido por el juez Marcelo Gutiérrez del Barrio, el abogado defensor de Bordón, Maximiliano Legrand, y el fiscal que instruye la causa, Gustavo Stroppiana, acordaron la figura del juicio abreviado, y oficializaron el acuerdo a una condena de 10 años de prisión efectiva.
En el mes de mayo del año pasado la Justicia elevó a juicio oral la causa principal por los casos de abuso sexual de niños con hipoacusia en el instituto Antonio Próvolo, que se inició en noviembre de 2016.
Los voceros informaron que el juez Carlos Diaz, presidente del Tribunal interviniente en la causa, ya resolvió todas las presentaciones realizadas, tanto por la fiscalía a cargo de Stroppiana, la querella, y por la defensa de los imputados respecto al rechazo o aceptación de las pruebas que se debatirán durante el juicio.
También se aclaró que como es un delito de instancia privada no se podrá ingresar a la sala de debates.
Sin embargo, debido a la repercusión que generó el caso y la cantidad de periodistas que van a cubrir el juicio, se realizará una acreditación para que la prensa pueda transitar por la zona de las salas durante las audiencias.