Sasha Daniel Baeza tiene 12 años y cuando nació en 2007, en Mendoza, fue inscripta como Sofía y en el espacio del DNI destinado al "Género" -aunque está identificado como "Sexo"- , marcaron "femenino", y si bien la categoría "bigénero" no existe legalmente, Sasha y su madre -Eva Baeza (34)- iniciaron hace dos meses el trámite para que en su partida de nacimiento y en su DNI figure la leyenda "no consignado".
Tiempo atrás se definió a sí misma como Sasha Daniel: "Siempre sentí que yo era los dos, pero lo reprimía. Porque la sociedad lo reprimía, y yo sentía que tenía que ser uno u otro; pero no podía ser los dos. Hace un año empecé a investigar, me hice preguntas, fui a la psicóloga y me saqué todo de adentro. Y me reconocí como bigénero", remarcó.
"Me da lo mismo que me traten de 'chico' o 'chica'. El otro día fui a cargar la RedBus y quien me atendía me dijo 'ahí estuvo, caballero'. Y fue raro, porque era la segunda vez en que me trataban de hombre. Pero a la vez está bueno. Lo que sí me molesta es cuando me dicen 'Sofía', ese ya no es mi nombre. Sofía ya murió", agregó.
Respecto a la parte legal, Eva Baeza, madre de Sasha Daniel contó que "hace dos meses hicimos el pedido de que se consigne en su DNI como bigénero, con la abogada Leonora Lam. No tuvo entidad ese pedido. Ahora la abogada nos ha recomendado no consignar el género, y en una segunda instancia apelar para que aparezca como bigénero, la ley es binaria, solo acepta varón o mujer. Tenemos que apelar al Poder Judicial. Su identidad existe".
"Elle es nena y es varón, es las dos cosas, le puedo decir Sasha o Daniel. También podemos usar el lenguaje inclusivo. Yo, como todos los padres, le coloqué un nombre y pensé que lo iba a llevar toda la vida, pero me tengo que acostumbrar a decirle Sasha o Daniel. Pero me voy acostumbrando. Elle no tiene padre, somos una familia monoparental", detalló Eva.
Sobre sus aspecto Sasha Daniel, puntializó: "Si me corto el pelo, no es porque soy machito. ¡Es porque me gusta cortarme el pelo!. Tampoco falta el que cree que estoy confundide. ¡Yo no estoy confundide, no tengo nada que definir!. Por años me confundió la sociedad que me dijo que tenía que ser cisgénero heterosexual, y que por haber nacido mujer tenían que gustarme las princesas y el rosado" y remató "no me gustan las muñecas, el rosado ni el pelo largo. Tampoco me gusta el fútbol".
Y describiendo su camino actual y de cara al futuo resaltó: "Hay que darse cuenta de que en la niñez, la adolescencia y la pre adolescencia uno puede ser muy maduro. Y en ese período se puede descubrir la identidad y la orientación sexual. Incluso, mi mamá y mi abuelo siempre me dicen que cada día aprenden más conmigo que con otras cosas. Cuando uno es sincero con uno mismo, ya hizo lo que le corresponde". Fuente: radio Nihuil - Mendoza Post - Los Andes.