El presidente Alberto Fernández mantuvo un duro intercambio con Boris Johnson, el primer ministro británico, por la soberanía de las Islas Malvinas, en el marco de la cumbre del G7 realizada en Alemania. Fernández pidió que se haga efectivo el cumplimiento de lo establecido por la ONU mediante Resolución 2065 (XX).
Dura y cortante fue la respuesta del británico, quien expresó “Ese es un tema que se resolvió hace 40 años”.
Ante la respuesta de Johnson, Fernández le recordó que no es intensión de la Argentina retroceder en el legítimo reclamo de soberanía e integridad territorial y remarcó que “si no resolvemos ese tema, toda la relación va a estar trabada”.
“Lo que hubo hace 40 años fue una guerra. Desde entonces, todos los años Naciones Unidas dice que hay que sentarse a negociar”, dijo el presidente argentino. Por su lado, el canciller Santiago Cafiero reforzó ese reclamo en el Comité de Descolonización de Naciones Unidas.
“Lo mismo que pensamos para Ucrania, que es la autodeterminación, vale para Malvinas”, replicó Johnson. Fernández, en la reunión que fue pedida por el británico y estaba prevista para diez minutos pero se extendió por media hora, le aclaró que son temas distintos, que no guardan relación, ya que “las Malvinas son enclave colonial”.
En este sentido, el presidente argentino recalcó la necesidad de restablecer los vuelos a las islas desde continente y que para eso hay que resolver el tema de la soberanía. “Ese es un tema importante. Si no avanzamos en ese tema, no vamos a poder avanzar en otros temas”, sugirió.
Sobre los vuelos a realizarse con la aerolínea de bandera, Fernández expresó que “es una prioridad para nuestro gobierno, ya que lo consideramos un factor fundamental para consolidar la confianza en la relación bilateral entre ambos países”.