"Yo vi flamear la bandera argentina en Malvinas". Así titulo Héctor Ricardo García su crónica sobre un hito en la historia: fue el único periodista presente en el Operativo Cóndor, en 1966, una de las acciones más audaces de de la resistencia peronista: el secuestro de un avión de Aerolíneas Argentinas por parte de 18 jóvenes militantes para hacerlo aterrizar las Islas Malvinas.
El fundador de Crónica, quien falleció este sábado, estuvo presente en ese hecho emblemático de su vida y su carrera periodística. Los viajeros de ese avión, en su mayoría obreros, izaron la bandera argentina en el territorio bajo el dominio de los ingleses.
Ocurrió el 28 de septiembre de 1966, cuando siete banderas argentinas flamearon durante 36 horas en Puerto Rivero. García fue protagonista privilegiado de ese episodio: era uno de los 48 pasajeros del Douglas DC4 del vuelo 648 que partió de Buenos Aires a Río Gallegos, un destino alterado por Dardo Cabo y Alejandro Giovenco, que entraron armados a la cabina en pleno vuelo y le ordenaron al comandante de la nave el cambio de rumbo hacia Malvinas.
Ya en el archipiélago aterrizaron en una pista para carreras hípicas del rebautizado Puerto Stanley y desplegaron delante del avión, del que descendieron por sogas, las banderas argentinas, tomaron rehenes y cantaron el Himno Nacional.
La ocupación simbólica de la isla por el comando peronista duró 36 horas, cuando se firmó un acuerdo entre los las autoridades de Malvinas, el gobierno inglés y el argentino para devolver al continente a los "ocupantes" y dar por terminada la acción que perseguía el objetivo de reclamar la soberanía argentina sobre las Malvinas. Y, aunque sostenía que había viajado allí en carácter de periodista, y que "desconocía las intenciones del operativo", terminó detenido junto con los organizadores y luego fue liberado en Tierra del Fuego.
No fue la única vez que estuvo privado de su libertad o que transitó situaciones extremas. El 8 de marzo de 1973 fue secuestrado por la guerrilla ERP-22 de Agosto, una fracción del ERP, bajo la dirección de Víctor Fernández Palmeiro, quien lo liberó luego de que García accediera a publicar un comunicado de la organización en su diario Crónica.
En tanto, durante la última dictadura, en junio de 1976, estuvo prófugo durante tres semanas luego de un allanamiento a la redacción del diario, motivado por la publicación de la muerte de Mario Santucho, líder del ERP.
Por último, en abril de 2011, el fiscal Marcelo Agüero Vera pidió 5 años y 8 meses de prisión para García debido a una denuncia de la AFIP sobre evasión impositiva, de la que fue absuelto casi un año después, aunque por esa misma causa había estado 7 meses en prisión domiciliaria.