Era la máxima expresión en la conjugación de simpleza y tenacidad. La humildad y compromiso con los Derechos Humanos lo caracterizaron durante décadas enmarcadas en luchas impulsadas por movimientos sociales de todo el país. Hombre verborrágico a la hora de hablar de los delitos cometidos durante la dictadura militar, supo izar cada mañana, la bandera en apoyo a los sectores más postergados de la sociedad.
Su detención se realizó a fines de 1975 durante el gobierno de Estela Martinez de Perón, y durante 8 años permaneció encarcelado. Recién en 1983, recuperó su libertad, con el retorno de la democracia. Se convirtió así, en uno de los presos políticos riojanos que mas años permaneció preso ilegalmente ya que su detención nunca tuvo una orden judicial.
Desde hace un tiempo padecía hepatitis B. Esto no impedía la presencia de Miguel en las manifestaciones públicas o sus presencias en las audiencias enmarcadas en los juicios por delitos de Lesa Humanidad. Hace aproximadamente 1 año tuvo una intervención quirúrgica por un problema en la vesícula en el Hospital Ferroviario.
Durante el ultimo tiempo, se encontraba internado en una clínica de Buenos Aires y esperaba participar en la audiencia de este viernes, donde se dará lectura a la sentencia contra César Milani en La Rioja.