Después de la Batalla de Castañares, el 18 de noviembre de 1834, se iniciaron los trabajos para la organización política de la provincia. Así, entre diciembre y enero, se realizaron los comicios para elegir a los diputados constituyentes que escribirían las páginas de la organización política de Jujuy como provincia autónoma y que darían forma a las instituciones liberales del gobierno representativo.
El 15 de enero de 1835, en la casa de Juan Ignacio del Portal, se reunieron en Sesión Preparatoria los representantes Pablo Soria, Juan Ignacio Guerrico, Pedro Castañeda y Julián Gregorio Zegada, por la capital; Simón Montenegro, por Tumbaya; Manuel Ignacio del Portal, por Humahuaca; Manuel Rosa de la Quintana, por Yavi; Mariano Santibañez, por Santa Catalina; José Mariano de la Bárcena, por Cochinoca; Fermín de la Quintana, por Rinconada; y Miguel Puch, por Perico.
Entre los asuntos tratados se destaca el rechazo al diploma del diputado por Rio Negro; no se mencionó su nombre, pero se pidió una nueva elección. Como autoridades provisorias se eligió a Juan Ignacio del Portal como presidente, y a Manuel Rosa de la Quintana como secretario.
Los representantes se declararon “Junta General Constituyente” *, persiguiendo como objetivo fundamental la redacción y sanción de un reglamento provisorio para la administración político-jurídica de la provincia autónoma de Jujuy.
Finalmente, en la sesión del 7 de marzo de 1835, la Primera Legislatura provincial quedó integrada por Pablo Soria (vicepresidente segundo), Pedro Castañeda, Francisco Borja Fernández y Manuel Rosa de la Quintana, representando a la capital; Roque Alvarado, por Yavi; Marcelino Bustamante, por Tumbaya; Manuel Ignacio del Portal (presidente), por Humahuaca; Mariano Santibañez, por Santa Catalina; José Mariano Bárcena, por Cochinoca; Francisco Zavaleta (en reemplazo de Fermín de la Quintana, elegido como gobernador de la provincia), por Rinconada; Miguel Puch, por Perico; y José Manuel de la Quintana, representando a Río Negro.
Esta Legislatura se disolvió el 28 de noviembre de 1835 al producirse la invasión de las fuerzas federales del coronel Eustaquio Medina.
Medina, jujeño y combatiente de las guerras por la independencia, se erigió apasionado defensor de la causa federal, su programa era derribar el régimen unitario y “nivelar la provincia con las demás de la federación”.
En la madrugada del 28 de febrero, las tropas comandadas por Medina entraron en la ciudad por la actual calle Sarmiento.
El gobernador Fermín de la Quintana huyó junto con otros jefes unitarios y el caudillo federal convocó al cabildo para nombrar un gobernador y capitán provisorio. Eustaquio Medina fue nombrado gobernador por aclamación pública, mientras los unitarios, dirigidos por el coronel Miguel Puch, preparaban una contrarrevolución.
(*) El manuscrito original del Acta se encuentra en el Archivo Histórico de la Legislatura de Jujuy, resguardado con todos los cuidados necesarios para su conservación.