El secretario de Desarrollo Industrial y Comercial de Jujuy, Diego Suárez, fue uno de los asistentes a la reunión que mantuvo este lunes en la Casa Rosada el ministro del Interior, Guillermo Francos, con demás representantes de la producción de las provincias de Santa Fe, Entre Ríos, Córdoba y Tucumán, que en conjunto le plantearon la necesidad introducir modificaciones en los artículos relacionados con el tema biocombustibles contenidos en el proyecto de “ley ómnibus” enviado por el Poder Ejecutivo al Congreso para su tratamiento en sesiones extraordinarias.
Días pasados el gobernador de Jujuy Carlos Sadir escuchó la preocupación de la industria azucarera local frente las reformas establecidas tanto en el DNU como en la “ley ómnibus” impulsada a por el presidente Javier Milei, interpretando que “afectarían significativamente” la actividad productiva y la rentabilidad del sector.
Suárez estuvo en esa reunión en el Salón Fascio de la Casa de Gobierno con directivos de los ingenios y los cañeros independientes, por lo que fue el portador de esas preocupaciones en el encuentro con el Ministro del Interior.
Si la iniciativa referida a los biocombustibles se aprueba sin modificaciones, significará “un retroceso para la industria”, sostienen los productores y empresarios del sector.
ERAN “TEMAS QUE SE HABÍA COMPRENDIDO MAL”, DIJO FRANCOS
Tras escuchar los planteos, Francos dijo que en el encuentro con las provincias se pudo “clarificar algunos temas que se había comprendido mal del proyecto de ley ‘Bases y Puntos de Partida para la Libertad’ con relación al corte de bioetanol y de biodiesel, que tienen un fuerte impacto en la actividad de pequeñas y medianas empresas en cada distrito”, reconoció.
En esa línea, el ministro de Desarrollo Económico y Producción de Jujuy, Juan Carlos Abud Robles, también calificó como “preocupante” la medida orientada hacia “la desregulación del bioetanol y la posibilidad que se pueda importar a costos mucho más bajo de países que tienen excedentes”, a lo que sumó la ampliación de la oferta con la producción de bioetanol derivado de maíz y soja, lo que beneficiaría a provincias de la pampa húmeda.
En la reunión de la semana pasada con el sector “establecimos una agenda para evaluar propuestas alternativas, y con nuestros diputados nacionales Jorge Rizzotti y Natalia Sarapura vamos a fijar una posición frente a este tema para la defensa de la economía regional de Jujuy”, remarcó Abud Robles.
FRANCOS GARANTIZÓ UN MÍNIMO DEL 12%
El ministro Guillermo Francos dijo que en el intercambio de este lunes quedó en claro que el porcentaje de corte de biocombustibles establecido en el proyecto de ley, que es del 12%, “es un piso que no va a reducirse y acordamos seguir conversando y analizando estos temas, que tienen impacto en las economías regionales de cada provincia”, según un comunicado que difundió el Ministerio del Interior.
Entre los principales cambios que propone el Gobierno en el capítulo de biocombustibles en la denominada “ley ómnibus”, que contempla modificaciones a la ley 27.640 que regula al sector, figuran la eliminación del sistema de cupos por empresa para abastecimiento interno y la puesta en marcha de un esquema de libre acuerdo de precios entre las partes, sin la intervención del Estado.
El proyecto del Ejecutivo también permite la importación del biocombustible y que las petroleras puedan participar del negocio.
EL IMPACTO EN EL SECTOR AZUCARERO
“Es inquietante la situación para un sector que ocupa 57 mil trabajadores en todo el norte y con más de 200 mil familias que viven de la producción si sumamos a los proveedores”, dijo a los periodistas el Ministro de Producción jujeño tras la reunión junto al gobernador Sadir.
En ese plano advirtió claramente que “de sancionarse todo como está planteado en el DNU y en la Ley, influirá negativamente en las economías regionales, particularmente para Jujuy”.
Entre los puntos que pusieron en alerta al sector figura “la reducción de aranceles para la importación de azúcar”, particularmente lo que se refiere al Mercosur por “la capacidad productora de Brasil con once millones de hectáreas contra cuatrocientas mil de Argentina”, señaló el funcionario.
“Reducir o eliminar el arancel pondría en una grave crisis a la industria y sería peligroso para todo el norte”, alertó Abud Robles.
