El Tribunal en lo Criminal Nº 2 de Jujuy absolvió por unanimidad al campesino Rodolfo Gustavo Páez del delito de usurpación denunciado por una empresa jujeña, por considerar que no existió delito en el lugar donde habita hace más de 80 años.
Los jueces Antonio LLermanos – presidente de trámite-, Luis Ernesto Kamada y Claudia Cecilia Sadir, declararon además la nulidad del alegato del querellante adhesivo "por falta de adhesión al requerimiento de elevación de la causa a juicio", informaron fuentes judiciales.
La familia Paéz vive en el Paraje Las Vertientes en Palma Sola, Jujuy, desde hace 80 años. Los parientes de su esposa, Jacoba Lidia López, permanecen en ese territorio desde hace casi cien años.
El juicio fue considerado histórico porque generalmente "estas causas no llegan a un juicio oral", refirió la abogada defensora de Paéz, María José Castillo, al explicar que los campesinos "son desalojados previamente, no sólo hemos evitado el desalojo".
"Hemos demostrado –continuó- que quien tiene la tierra, quien la habita, la cuida es el poseedor y no basta con tener un título, no basta con comprar papeles en Buenos Aires, para llevar adelante el despojo a los campesinos ni pueblos indígenas", sostuvo Castillo.
En los alegatos, tanto el Ministerio Público de la Acusación, mediante el Fiscal habilitado, Ernesto Lian Resúa; como la Querella Adhesiva, representada por Fernando Barconte Ramos, solicitaron que se condene al imputado por el delito de usurpación.
En tanto, la defensa técnica de Páez solicitó la absolución del mismo y la nulidad de la participación y alegatos de la querella, por no garantizar el debido proceso y por no considerarla víctima de los supuestos hechos delictivos.
La empresa Finca La Jujeña S.A, fue la denunciante, una firma que según la defensa de Paéz está vinculada al empresario Carlos Pedro Blaquier, dueño de la empresa Ledesma.