Los damnificados por un deslizamiento de terreno en La Paz, Bolivia, solicitaron apoyo internacional para costear parte de la inversión que se necesita para estabilizar el suelo y evitar que decenas de viviendas corran la misma suerte que las que se desplomaron.
En una improvisada asamblea posterior a la visita del presidente del país, Evo Morales, las familias decidieron "exigir la estabilidad" del terreno a las autoridades locales, informó EFE.
Morales aseguró que no va a dejar librados a su suerte a los cientos de afectados que viven en campamentos de acogida en La Paz tras el deslizamiento del terreno que destruyó decenas de casas. "No los vamos a abandonar", aseguró el Presidente megáfono en mano ante los vecinos alojados en uno de estos campamentos en la ciudad.
"Tenemos que hacer gestiones con el municipio de La Paz, tal vez tratar de pedir ayuda internacional", dijo Adolfo Machicado, presidente de la junta de vecinos de la localidad de Inmaculada Concepción.
El dirigente sostuvo que son necesarios "quince millones de dólares para cubrir una mitad de los fondos necesarios para la estabilización" de la zona.
La reunión se dio después de que el presidente Morales dijera que la estabilización del terreno "es exclusiva" responsabilidad de la Alcaldía.
Los damnificados también demandan que continúe la búsqueda de las cuatro personas que fueron declaradas desaparecidas desde el pasado 30 de abril, cuando se produjo el deslizamiento.
Machicado instó a los vecinos a estar agradecidos con Morales, quien prometió que el Gobierno entregará viviendas a las familias que perdieron todo en el deslizamiento, y también a la Alcaldía, que garantizó terrenos para construir los inmuebles.
El deslizamiento de tierra, ocurrido en las zonas paceñas de San Jorge Kantutani e Inmaculada Concepción, dejó 68 viviendas totalmente colapsadas, 22 que deben ser demolidas, 26 en las que se analiza la demolición o su reparación y 53 evacuadas de manera preventiva, según datos de la Alcaldía.
El número de damnificados en campamentos ronda las 580 personas, según la misma fuente.