El Ministerio de Relaciones Exteriores de Ucrania habló de una “campaña de terror bien planificada” al denunciar este viernes que al menos seis de las embajadas del país en la Unión Europea recibieron paquetes sospechosos.
Además, el pasado miércoles un empleado de la embajada de Ucrania en Madrid sufrió heridas leves al estallarle una carta bomba destinada al embajador. Fue entonces cuando Kiev ordenó reforzar la seguridad en todas sus sedes diplomáticas.
Las embajadas afectadas fueron las que están en Hungría, Países Bajos, Polonia, Croacia, Italia y Austria, así como los consulados de Nápoles y Cracovia y Brno. “Recibieron paquetes sangrientos”, dijo Oleg Nikolenko, portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores.
“Los paquetes estaban empapados con un líquido”, comentó sobre lo que sería sangre. “Es una señal muy fuerte’', comentó el cónsul de Ucrania en Nápoles, Kovalenko Maksym. El diplomático confirmó que su oficina recibió dos paquetes alrededor de las 10.30 del jueves que contenían ojos de pez.
“Tenemos motivos para pensar que se ha iniciado una campaña bien planeada de terror e intimidación contra las embajadas y consulados de Ucrania”, señaló el ministro de Relaciones Exteriores, Dmytro Kuleba. Y agregó: “Seguiremos trabajando de forma efectiva para alcanzar la victoria en Ucrania”, añadió.
Cómo fueron los incidentes
Por otro lado, se dio a conocer que desconocidos vandalizaron la entrada a la residencia del embajador ucraniano ante el Vaticano y la embajada ucraniana en Kazajistán recibió una amenaza de un “presunto ataque con minas”, pero no fue confirmado.
En Polonia, el jueves llegó un paquete al consulado de Ucrania en la capital del país que “causó preocupación’' a uno de los empleados. Se notificó al departamento de policía para la protección de las misiones diplomáticas y se “eliminó rápidamente el peligro”, agregó el portavoz Sylwester Marczak.
En República Checa, la policía dijo que un escáner de rayos X no encontró explosivos en un paquete revisado, pero agregó que se encontró tejido animal en el interior que se sometió a pruebas de laboratorio.
Por su lado, el embajador de Ucrania ante el Vaticano, Andrii Yurash, dijo que la entrada a su residencia en Roma fue dañada el jueves por la tarde con lo que él creía que eran heces de animales.
La puerta del complejo de departamentos y las escaleras y paredes de la entrada estaban “manchadas con una sustancia sucia con un olor desagradable’', afirmó a The Associated Press.
En este marco, el ejecutivo de Volodimir Zelenski instó a los gobiernos extranjeros a “garantizar” la protección de las misiones diplomáticas ucranianas.