Mansión en Necochea, jets y helicópteros privados, vínculos con figuras políticas de poder y dueño de un imperio de transporte. Los días de lujos de Sergio Cirigliano se acabaron cuando fue reconocido como coautor del delito de administración fraudulenta en perjuicio de la administración pública en la Tragedia de Once.
Este martes se cumplirán diez años del fatídico hecho por el que el empresario recibió una condena de siete años de cárcel por “estrago culposo agravado por haber causado la muerte de 52 personas y lesiones en 789 personas”. Junto con el ex secretario de Transporte, Ricardo Jaime, fueron quienes recibieron la mayor pena entre los 22 condenados.
El 22 de abril de 2021, el empresario fue beneficiado con la prisión domiciliaria por problemas de salud que se agravaron en la cárcel y dejó el penal de Ezeiza para instalarse en uno de sus departamentos en la Ciudad de Buenos Aires, sobre la Avenida del Libertador, en compañía de su esposa como garante y con el control de una tobillera electrónica.
Al momento de la Tragedia de Once, Sergio Cirigliano era dueño de la empresa Trenes de Buenos Aires (TBA) que tenía la concesión del Ferrocarril Sarmiento. Junto con su hermano Mario eran los titulares del Grupo Plaza, que llegó a ser una de las empresas más importantes del país. Luego de los acontecimientos, los hermanos vendieron el Grupo al empresario Marcelo Zbikoski.
Cirigliano fue condenado en 2015 cuando terminó el primer juicio oral, pero quedó detenido recién en 2018. El 24 de septiembre de 2020, el máximo tribunal rechazó las apelaciones y la pena quedó firme. Después fue beneficiado con una reducción de pena y su castigo pasó de 9 a 7 años.
Quién es Sergio Cirigliano
Nació el 18 de marzo de 1964. Es hijo de Nicola Cirigliano, un italiano oriundo de Vaglio Basilicata y llegó a la Argentina con 18 años. Con dinero prestado de un amigo compró una ruta de autobús y así comenzó su empresa, originalmente de nombre Transporte Automotor Plaza en 1959.
Sergio comenzó en el negocio familiar luego de terminar el colegio y quedó a cargo junto a sus dos hermanos en 1975, cuando su padre ya no podía seguir al frente de la compañía por motivos de salud. Por entonces la familia poseía las líneas de colectivo 61 y 62. Con el desarrollo de la firma alcanzaron un imperio en el rubro. El empresario mantenía buenos vínculos con Carlos Menem y Néstor Kirchner.
La salud de Sergio Cirigliano
En 2007 se realizó un by pass gástrico por el que perdió 35 kilos. Pero su estado de salud empeoró en la cárcel. Según lo informado en la causa por la defensa, Cirigliano registró 29 episodios de hipoglucemia “graves y delicados” entre el 1 de febrero y el 4 de diciembre de 2020.
El mayor argumento para que Cirgliano abandonara la cárcel fue que sus problemas de salud aumentaron en los últimos meses: “Presenta un estado de vulnerabilidad aumentado” y el Servicio Penitenciario Federal expuso “la necesidad de otro modelo de contención y tratamiento médico”.
Fue la tercera vez que el empresario pidió la prisión domiciliaria. El 19 de marzo y 17 de abril de 2020 fueron las primeras con el argumento de la pandemia, pero el juez Jorge Gorini se había negado a que dejara la cárcel. Cumplirá su condena el 15 de septiembre de 2025.