Los vínculos amorosos y los nombres de las relaciones pueden cambiar según las personas que los conformen y sus ideologías. En este caso, la agamia, surge como una idea sobre las relaciones para aquellas personas que no se encuentran ni en la monogamia ni en el poliamor.
Qué es la agamia
Según lo que explicó la psicóloga y sexóloga Noelia Benedetto: “Las personas que eligen la agamia buscan redefinir las relaciones y romper con los mandatos sexoafectivos establecidos. Rechazan las instituciones patriarcales y las parejas monógamas como el estándar de relación ideal. Tienen vínculos, pero no centrados en el amor romántico y la exclusividad”. Pero, tiene diferentes puntos con relación a la soltería.
La agamia directamente rechaza los modelos de unión matrimoniales o compromisos formales, ya que es un concepto relacionado directamente en las prioridades personales y la independencia. “Describía con mucha lucidez esta realidad que yo había percibido tácitamente y hacía una crítica muy fina a los problemas actuales de nuestras relaciones, allí donde el amor consciente o las no monogamias solo ponían parches, pero perpetuaban los mismos problemas. Se daban muchas deudas emocionales que se justificaban mediante el amor y que eran nocivas para el desarrollo sano de las personas”, expresó Inés en una charla con TN.
Cuál es la diferencia entre soltería y agamia
A primera vista parecen dos términos relativos e iguales, pero los especialistas señalan que tienen puntos que los hacen diferentes.
- Persona soltera: No está en una relación, pero no lo hace por una crítica a los modelos de pareja, sino que puede ser una fase transitoria y no descarta comprometerse con alguien en cualquier momento.
- Persona ágama: Rechaza radicalmente la estructura de relaciones tradicional, las cuestionan y no están vinculados a un estado civil, sino que lo toman como un posicionamiento político.