Cómo enseñarle a tu perro a ir al baño: guía sencilla recomendada por los expertos

Una experta recomienda acostumbrar al cachorro a estar en una jaula, usar empapadores y controlar la dieta.

Cómo enseñarle a tu perro a ir al baño: guía sencilla recomendada por los expertos
Guía sencilla de cómo entrenar a tu cachorro.

Uno de los desafíos más comunes al integrar a la familia a un perro recién nacido es enseñarle a ir al baño en el lugar correcto. Esto implica establecer una rutina, aplicar técnicas específicas que ayuden a los cachorros a entender dónde y cuándo deben hacer sus necesidades.

Los empapadores sirven para que el cachorro haga sus necesidades en lugares determinados.
Los empapadores sirven para que el cachorro haga sus necesidades en lugares determinados. Foto: La Dog Mami

Cómo enseñarle a los perros a ir al baño

Mary Burch, directora de los programas Canine Good Citizen y STAR Puppy de American Kennel Club, revela algunos consejos básicos para enseñar a las mascotas a ir al baño:

  • Las jaulas ocupan un lugar destacado como herramienta de entrenamiento: “A muchas personas que recién comienzan a tener perros les da escalofríos la idea de encerrar a sus cachorros en una jaula, pero la reticencia a utilizar esta herramienta generalmente desaparece después de unos días de vivir con una nueva mascota. Las jaulas para perros hacen la vida más fácil. Es una buena idea acostumbrar a tu perro a una por muchas razones, como las visitas al veterinario o los viajes”, indicó la experta.

Y continuó: “Los perros son animales de madriguera y buscarán una pequeña cueva canina para protegerse, ya sea que les proporciones una o no. Eso hace que sea relativamente fácil entrenar a tu perro para que ame su jaula”. Detalló que la jaula debe ser del tamaño adecuado: si es demasiado grande, el perro posiblemente utilice una esquina para hacer sus necesidades.

Cuando el perro quiera ir al baño, “te lo hará saber gimiendo y rasguñando. Esa es la señal de que tienen que ir y quieren salir de su pequeña guarida. ¡Ahora! Si dejas que tu perro pierda el control en su jaula, entenderá que está bien ensuciar su espacio vital”, afirmó Burch.

  • Uso de empapadores para cachorros: En una situación ideal, los cachorros aprenderían a aguantar sus necesidades hasta salir al exterior y solo las harían en lugares específicos al aire libre. A su vez, los empapadores brindan una solución práctica, permitiendo que el perro haga sus necesidades en un área designada dentro de la casa.
  • Entrenamiento en casa: “Mantener un programa de adiestramiento constante es fundamental para el éxito”, afirmó la experta. Una buena regla general es que los cachorros pueden mantener la vejiga durante un número de horas igual a su edad en meses, hasta alrededor de los nueve meses o un año. No obstante, indica que de 10 a 12 horas es mucho tiempo para que cualquier cachorro lo aguante.
  • Observar y supervisar al perro: “Debes observar atentamente a tu cachorro para detectar señales y ritmos individuales. Algunos cachorros pueden aguantar más que otros, mientras que algunos tendrán que salir cada vez que juegan o se emocionan. Otros se detendrán en medio de una sesión de juego, orinarán y seguirán jugando. Al igual que con los bebés humanos, los hábitos de los perros para ir al baño son muy idiosincrásicos”, afirmó Burch.
  • Controlar la dieta del perro: la profesional recomienda dividir la alimentación del cachorro en tres comidas pequeñas. Analizar las heces es una manera de saber si es buena opción cambiar la dieta. “Si su cachorro produce constantemente heces voluminosas, blandas y malolientes, puede que sea momento de hablar con su veterinario. La sobrealimentación también puede provocarle diarrea, lo que solo hará que la tarea de adiestrarlo sea mucho más difícil”, afirmó.
  • Cómo reformar que el cachorro “salga” al exterior: recompensar a un cachorro por hacer sus necesidades en el lugar correcto es fundamental en el proceso de adiestramiento. La profesional recomienda ser entusiasta en elogios: aplausos o darle una golosina. Si ocurre un accidente, no es aconsejarlo retarlo.