El Alcázar, como todo municipio de pocos habitantes, depende casi exclusivamente del Estado para encarar obras de infraestructura e incluso, achicar el desempleo. La crisis económica de los últimos tiempos también afectó a la gestión de José Ferreira, quien calificó los últimos cuatro años "de mucho sufrimiento".
"El presupuesto siempre es acotado, tenemos intenciones de hacer muchas cosas, pero en pueblos como El Alcázar que no llega a 10 mil habitantes, no somos autosuficientes. Porque no se trata solamente de pagar los sueldos, sino que hay que planificar algunas obras que el pueblo está esperando", contó a Misiones Online el intendente que renovó por amplio margen su mandato en las pasadas elecciones. No obstante, Ferreira es optimista de cara el futuro "porque es un acierto que nuestro gobernador Herrera Ahuad esté alineado con la Nación para trabajar en conjunto".
Con relación a la actividad económica del pueblo, Ferreira reiteró su dependencia casi exclusiva de "la coparticipación provincial, porque si bien tenemos algunas empresas importantes en la zona como Arauco, que tiene unas 11 mil hectáreas en nuestro municipio y eso significa un aporte muy importante para nuestras arcas, hay otras que están en crisis como la ex Papel Misionero y un aserradero que todo este tiempo estuvo prácticamente parado sin poder vender madera".