La sequía y la caída en las exportaciones dejaron números preocupantes de cara al resto del año

La preocupación de cara a lo que resta del año pone el foco en las complicaciones para exportar como las trabas a las importaciones que llegan ante la falta de reservas.

La sequía y la caída en las exportaciones dejaron números preocupantes de cara al resto del año
La productividad del campo con efecto de la sequía y consecuencias en el Banco Central.

La Argentina atraviesa un inicio de año muy complicado en términos económicos: alta inflación, una sequía que afecta al país y las trabas a las importaciones. Esto llevó a que en el primer bimestre del año se registre la primera caída en la balanza comercial de casi el 80% respecto al mismo período del año pasado.

En ese sentido, el primer bimestre acumuló un importante déficit, siendo el peor número desde 2018, donde el país pasó por una situación similar a la reciente, con problemas para la producción agrícola. Justamente, lo que se vio afectado fueron las exportaciones del segundo mes del año, cerrando un arranque de 2023 preocupante en niveles económicos.

Por la sequía las exportaciones cayeron 19% en febrero y el superávit comercial se redujo 78%
Por la sequía las exportaciones cayeron 19% en febrero y el superávit comercial se redujo 78%

En ese sentido, el primer bimestre cerró con un déficit comercial de U$S 261 millones, contra un saldo positivo de U$S 1.115 millones del mismo período de 2022. Así se registró en febrero un superávit de apenas U$S 182 millones, que representa una baja de 78% respecto al mismo mes del año pasado.

Un informe de Ecolatina advirtió sobre el tema donde también puso el foco en las importaciones donde se contrajeron al calor de las restricciones. Las compras externas alcanzaron los USD 5.000 M (-10% i.a.), y su desmejora estuvo explicada exclusivamente por una violenta caída en los volúmenes importados (-12% i.a.), dado que los precios treparon (+1,6% i.a.) por tercer mes consecutivo”, señala el documento.

“Así, el flujo comercial (exportaciones + importaciones) totalizó USD 10.300 M en febrero (-15% i.a), acusando principalmente el impacto conjunto de la sequía y las restricciones sobre los volúmenes, con una menor influencia de las variaciones en los precios”, completó.

Las exportaciones se vieron afectadas principalmente por la sequía en los productos primarios. El trigo destacó como el producto de mayor caída en su comparación interanual, desplomándose 90% i.a. (- USD 685 M), exportando apenas USD 75 millones.

La evolución de la balanza comercial en los últimos años.
La evolución de la balanza comercial en los últimos años.

“En el primer bimestre, las exportaciones sumaron sólo USD 225 M, 85% menos que los USD 1.600 M exportados en 2022. Así, Productos Primarios (PP) totalizó ventas por USD 1.200 M (-33% i.a.), explicada esencialmente por una caída en los volúmenes del 35% i.a.”, señala el informe.

Esto afecta directamente sobre las reservas del Banco Central que siguen cayendo. “La autoridad monetaria acumula un rojo de casi USD 1.500 M este mes, mientras que lleva vendidos cerca de USD 2.550 M en 2023. Esto configura el peor arranque de año para el BCRA desde al menos 2003 (inicio de la serie)”, remarca la consultora.

En ese sentido, el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional afecta a la casa madre monetaria del país. Como resultado, las reservas internacionales netas (según la metodología del FMI) rozan actualmente los USD 1.200 M, cayendo casi USD 6.500 M en lo que va 2023.

Qué se espera para el resto del año en cuanto a las exportaciones

Los efectos de la sequía seguirán teniendo impacto directo sobre las exportaciones, generando pérdidas de ventas al exterior agrícolas próximas a los USD 20.000 millones en lo que resta del año. Como consecuencia de la menor liquidación, las ventas del BCRA en el mercado cambiario ya superan los USD 2.200 millones en lo que va del año, colocando a la autoridad monetaria en una frágil situación al reducir su poder de fuego para seguir sosteniendo la estrategia cambiaria del crawling peg.

La caída de las reservas del Banco Central.
La caída de las reservas del Banco Central.

En tanto que las restricciones a las importaciones se profundizarán a lo largo de 2023. Así, a los 2 p.p. de caída del PBI que significa de forma directa la caída en la cosecha de soja y maíz, se adicionará la agudización de las restricciones a los volúmenes importados no-energéticos, que limitarán la expansión potencial del mercado interno producto de un menor abastecimiento de insumos y bienes finales.