El presente que atraviesa Independiente no es el mejor, después de tener un arranque de campeonato donde peleó la cima del torneo e ilusionó a los hinchas con poder volver a ganar un título local, algo que no pasa desde 2002.
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Sin embargo, la venta de jugadores en medio del campeonato, una crisis institucional que atraviesa el club en la previa de las elecciones y apretadas de la barra por los malos resultados, no ayuda a mejorar el camino del Rojo.
En ese marco, uno de los referentes del equipo, Lucas Romero, se refirió a la actualidad del equipo y el presente en el campeonato. “En el grupo, somos todos muy autocríticos. Sabemos que no estamos pasando un buen momento. Veníamos de un semestre espectacular y un buen comienzo en el actual”, marcó.
En diálogo con ESPN F12, el mediocampista habló sobre su nivel individual: “Cuando llegué a Independiente, me costó la readaptación al fútbol argentino. Post pandemia, con Pusineri, subió mi nivel. Con Julio (Falcioni) estuve muy bien antes de la lesión que sufrí. Admito que he bajado mi rendimiento en los últimos partidos”.
Por otro lado, en un mercado donde no se pudieron traer refuerzos de jerarquía, Romero aseguró que “Independiente tiene mucho potencial en cuanto a juveniles”. “Toto Pozzo jugó muy bien el otro día. Chaco Martínez también, hizo un golazo”, agregó.
En ese sentido, no dejó pasar la oportunidad para hablar sobre la polémica de los fallos arbitrales que perjudicaron al Rojo en los últimos partidos. “Muchas veces, nos sentimos perjudicados. Con Vélez, hubo un gol en offside. Ante Sarmiento, un penal claro no cobrado. A veces parece que es siempre contra nosotros”, subrayó.
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Por último habló sobre la visita de la Barra Brava al vestuario después del empate con Sarmiento de Junín. “Fue un hecho lamentable lo que tuvimos que atravesar con la barra. En el fútbol argentino, parece natural. Fue un momento feo, en nuestra privacidad, nuestro vestuario. Ellos pedían actitud, ganas. A veces hablando mal. No tendría que pasar”, completó.