Organizaciones del Colectivo Hábitat de la ciudad se reunieron con los concejales del Partido Justicialista, Ataliva Laprovitta, Miriam Sosa y Justo Estoup para brindar su preocupación ante el avance del Plan Costero de Corrientes. Desde el Invico explicaron que en el encuentro intercambiaron diferentes temas al respecto pero, sólo cuentan con un plano general, aunque el Hábitat afirmó que podría desplazar varias familias de sus hogares.
Florencia Rus integrante del Colectivo de Hábitat e investigadores y arquitectos de la UNNE aseguraron que estos proyectos generan efectos que no habían sido tomados en cuenta para los trabajos. "Hay que tener en cuenta los efectos sociales de estos lugares de mucho valor patrimonial que hoy están en riesgo. Zonas portuarias como las Vías Navegables, la escuela técnica como también la Usina o el Regimiento de Infantería novena que necesitan saber qué pasará con esos espacios", explicó.
La arquitecta dijo que los que defienden el plan hablan de un "consenso generalizado" y que traería "progreso al a ciudad" pero, también manifestó que existiría desconocimiento de lo que hay detrás del proyecto. Informó que tampoco se habría realizado un diagnóstico para delimitar áreas afectadas.
Rus relató que en las obras realizadas en la Costanera Sur serían un ejemplo de reconversión costera, en donde su implementación condujo a la "expulsión o relocalización de familias que allí residían hacia la periferia", estas cuestiones no aparecen en la normativa.
Por otro lado, el arquitecto del Invico, Francisco Luciano explicó: "Es una ordenanza muy general que no plantea cómo se va a llevar adelante ciertas cosas. Hay muchas decisiones que son del ámbito privado que tienen como fin por ejemplo la construcción de torres de 35 pisos aproximadamente con un importante impacto ambiental".
El arquitecto contó que las dudas de las organizaciones se encuentran basadas en materia del aspecto urbano y uso de la costa. "Algunos de los argumentos eran bastante pobres como que Corrientes vive al costado del río, esto no es así. Su avance tendrá un fuerte impacto en el casco histórico de la ciudad", afirmó.
El representante de la entidad habitacional de la provincia comentó que entre 7.000 y 8.000 personas se mudarían cerca de las zonas costeras. Serían poblaciones de sectores elevados, ya que cada departamento rondaría los 200 mil dólares. "No nos oponemos a obras inmobiliarias pero, es necesario que se haga un equilibrio hacia los otros sectores. En Corrientes hay muchas villas y asentamientos", expresó.
En una nota presentada desde el Colectivo Hábitat que integra, sostuvieron que se trata de "grandes superficies de tierra pública sometidas a un carácter generalizado e indefinido de 'espacio público de esparcimiento para aprovechamiento del borde costero con usos mixtos compatibles, como residencial, oficinas y equipamiento comercial y de servicio'". Una modalidad público-privado que asumen, se generó en otras ciudades del país pero que está dirigido a "una demanda de alto poder adquisitivo". Según publicó El Litoral.
