Gustavo Santos dejo de ser diputado de la Nación, banca a la que accedió en 2021 por el distrito Córdoba, en representación de Juntos por el Cambio. Y lo hizo tras la polémica por cumplir funciones incompatibles.
Desde el año pasado, el cordobés se había instalado en Madrid, España, tras haber sido designado como director regional para las Américas de la Organización Mundial del Turismo (OMT). En aquel momento, Santos renunció a su dieta como legislador nacional, aunque su renuncia nunca fue efectivizada hasta este lunes.
En lugar de Santos, uno de los principales referentes de Mauricio Macri en Córdoba, asumirá el presidente del PRO, Oscar Agost Carreño, un dirigente enrolado en el larretismo.
La salida formal de Santos se produce una semana antes de que los diputados vuelvan a reunirse para abordar la controvertida ley de alquileres, algo que sucederá el próximo 23 de agosto.
La ausencia del cordobés genera inquietud desde hace tiempo en Juntos por el Cambio, porque significa un voto menos en momentos en los que los números en la Cámara Baja son ajustados.
LA POLÉMICA EN TORNO A LA FUNCIONES DE SANTOS
Santos se vio envuelto en una polémica después de que el diario Página/12 informara que el ahora exlegislador mantenía parte de su estructura económica como diputado, entre ella un grupo de siete asesores.
“La renuncia de Santos siempre estuvo a disposición del bloque. No es una cuestión individual de un diputado. Si no se concretó, fue por una decisión política. La renuncia está en el cajón del jefe del bloque, con quien Santos tiene un vínculo de años, igual que con Mauricio”, afirmaron meses atrás en el equipo del cordobés.
El diputado fue uno de los ministros de mayor confianza de Macri y muchos interpretan que esa relación tan estrecha fue el motivo por el cual el PRO lo sostuvo hasta ahora.