En las últimas horas, el emblemático colegio de la ciudad de Córdoba, Alejandro Carbó, estuvo envuelto en polémica por una poda de árboles supuestamente no autorizada. Fue una vecina de Alberdi, quien grabó un video en el que se podía ver como talaban una numerosa cantidad de vegetación.
En ese momento, el arquitecto Adrián Zak, indicó: “Siempre hay que pedir autorización porque es patrimonio nacional, adentro y afuera del edificio hay que preservarlo y si no se puede por X motivo hay que pedir autorización y recién talarlo”.
Ahora, la Dirección de Infraestructura Escolar, dependiente del Gobierno de Córdoba, indicó que en el colegio había ejemplares enfermos y con “síntomas de decrepitud”, y por esta razón se decidió la poda. Además precisó que los trabajos estaban autorizados.
Desde la entidad señalaron que se había optado por una poda pero que en el momento de la “revisión ocular” verificaron que había ejemplares “podridos” que podrían perder estabilidad y podrían “generar futuros accidentes”.
“En algunos ejemplares, al momento de la revisión ocular, se había optado por la poda y observar el estado del duramen. Al avanzar con la poda se verificó que el duramen estaba ausente (hueco) o podrido, por lo que se decidió el corte y posterior reemplazo del ejemplar, para evitar futuros accidentes por la caída de los mismos”, indicaron a Cadena 3.
Y completaron: “Se debe tener en cuenta que el sostén estructural del árbol es el duramen, si este no existe o se encuentra en estado de pudrición, la estabilidad del árbol se encuentra comprometida”.