La Fundación del Banco Central de Sangre de Córdoba compartió una situación “grave” ya que cuenta con la mitad de donadores necesarios. Ante esta situación, destacaron la falta de políticas provinciales y nacionales.
El director del principal proveedor de sangre de los centros de salud de la capital, el doctor Horacio Carrizo (MP 26106), aseguró que concluyeron el 2022 con “un 50% menos de los donantes” que deberían tener.
“Esto viene de antes de la pandemia, solo que eso la visualizó”, contextualizó el referente. En tanto, informó que el 75% de los pacientes no es compatible con sus familiares y eso deriva en la necesidad de recurrir a la entidad.
Las consecuencias de la falta de sangre en los hospitales de Córdoba
“Lo poco que ingresa entra a la mañana y se distribuye a la tarde. No cubre todas las necesidades”, expresó el director. Además, indicó que los donantes de sangre “bajan en gran medida en enero y febrero”.
Con este escenario, el señor puntualizó algunas de las consecuencias de la problemática: “Se posponen cirugías o paciente con anemia tienen que esperar hasta que la sangre este disponible para seguir con su tratamiento”.
Carrizo dejó un mensaje para las autoridades. “Hay que reformular las políticas de donación de sangre, si el 3% de la población donara una vez al año cubriríamos todas las necesidades, según la Organización Mundial de la Salud”, enfatizó.
Para concluir el titular del Banco de Sangre anticipó que “si en el país hubiera una catástrofe la situación sería terrible”. Cabe destacar que, una persona donante puede salvar hasta cuatro vidas.