A cinco meses de la muerte de Luciando Aranda, el adolescente que falleció electrocutado en una plaza de barrio Alto Alberdi por tocar un poste de luz, la Justicia de Córdoba imputó a los empleados municipales implicados. Se trata de cuatro trabajadores estatales que fueron acusados del delito de homicidio culposo.
El fiscal del Distrito I, Turno 2, Guillermo González, es quien lleva adelante la investigación y desde el primer momento ordenó una serie de peritajes para establecer cómo falleció el adolescente. Ahora, el magistrado imputó a Ramón Cuello (jefe de Mantenimiento de Alumbrado Público), Hugo Chocobares, Marcos Farioli y Julio Sebastián Banegas, estos últimos dos estaban a cargo de Mantenimiento.
Todo ocurrió en enero del corriente año, cuando el chico de 14 años se encontraba jugando junto a su hermano menor en el espacio verde ubicado en calle Achával Rodríguez al 1.953. Al tocar el poste de alumbrado público recibió una tremenda descarga eléctrica que terminó con su vida.
Por su parte, su hermano, de 12 años, también se electrocutó, fue hospitalizado y se salvó. Cabe destacar que tras conocerse el trágico suceso, desde la Municipalidad de Córdoba difundieron una foto del poste, en cuya caja de circuitos eléctricos tenía una piedra, símbolo de que había sido vandalizado.
Sin embargo, la familia del pequeño difunto se constituyó como querellante en la causa, bajo la defensa del abogado Carlos Nayi. “Hay una ley de responsabilidad del Estado, la 26.944. Hay una omisión antijurídica. Se ha invadido una zona de riesgo no permitido”, consideró en su momento el letrado. Y agregó: “El mantenimiento de alumbrado no se ha venido realizando de manera adecuada: la bajada a tierra es indispensable que esté formulada correctamente”.