Con la idea de acercar el helado a la gente a un precio accesible, la familia Santiago abrió la primera franquicia de Grido en el 2000. Ese primer paso lo dio en el corazón de barrio Alberdi, en la ciudad de Córdoba y en el mismo año, abrieron 10 locales más en otros barrios de la Capital.
“Lucas Santiago junto a sus hijos Lucas y Sebastián empezaron a gestar la idea a partir de una demanda insatisfecha de helado”, comentó Javier Diaz Caballero, líder de comunicación de Grido, en diálogo con Vía Córdoba. Según su relato, la idea de la familia era “democratizar el helado y llevarlo a los barrios”.
De a poco, la firma se expandió en Argentina y Latinoamérica. En la actualidad, está presente en todas las provincias y abastece con sus productos a Chile, Paraguay, Uruguay, Bolivia y Perú. Grido cuenta con casi 2.000 franquicias y el crecimiento es tan exponencial que está construyendo otra fábrica en Córdoba con el objetivo de duplicar su producción. De esta forma, Grido logró convertirse en la tercera cadena de heladerías más grande del mundo.
Con su presencia en cada rincón geográfico, la marca se fue ganando el corazón de los argentinos y sobre todo, de los cordobeses. Por eso, Vía Córdoba eligió a Grido para formar parte de un nuevo segmento informativo: Made in Córdoba. En este marco, se realizó un recorrido por su planta para conocer a fondo las líneas de producción y la magia detrás de un producto tan consumido a nivel nacional.
CÓMO ES LA PRODUCCIÓN DE GRIDO EN CÓRDOBA
La planta de Grido, que tiene alrededor de 16.000 metros cuadrados de superficie, se encuentra en el Parque Industrial Ferreyra, en la zona sudeste de la Capital. Dentro de las instalaciones, cada producto tiene su propia línea de elaboración: a granel, tortas, botes, bombones, postres y palitos helados.
En cuanto a los colaboradores, en la fábrica trabajan alrededor de 800 operarios en tres turnos rotativos de ocho horas. De esta forma, la producción está en marcha las 24 horas y solo se detiene los domingos. Desde Córdoba, Grido abastece a todo el país y al exterior. “En todos lados mantiene el mismo espíritu de estar cerca de la gente”, remarcó Diaz Caballero.
CÓMO SE HACEN LOS HELADOS DE GRIDO EN SU PLANTA CORDOBESA
La magia del helado comienza en las tinas de maduración, donde se mezclan todos los ingredientes para prepararlo. Desde allí, la crema viaja por mangueras a las estaciones, donde se . En el sector a granel, que es el helado que se puede comprar en cucurucho, hacen 6.000 cajas por hora. Cada caja contiene ocho kilos de helado, por lo que en un día producen un poco más de un millón de kilos.
En cuanto a cantidad, le siguen los palitos helados. Grido tiene la palitera más grande de Latinoamérica. Este sector no se encuentra totalmente automatizado, ya que un grupo de operarios se encarga de empaquetar los palitos en las cajas.
Una parte esencial del proceso está protagonizada por un túnel de frío, el cual se encuentra a 40 grados bajo cero. En ese lugar, las cremas permanecen por un determinado tiempo y se transforman en helado. Las tortas necesitan estar unas tres horas, mientras que el helado a granel unas seis. Asimismo, todas las líneas terminan en un mismo lugar: el almacén de frío.
Grido cuenta con una cámara de frío que equivale a un edificio de 12 pisos y puede almacenar hasta 12 millones de kilos de helado bajo temperaturas que rondan los 30 grados bajo cero. Desde allí salen los pedidos a las franquicias y a los camiones distribuidores, los cuales viajan a unos 20 grados bajo cero y también son monitoreados por la empresa.
Con un alto nivel de producción, la firma proyecta finalizar las obras de su segunda planta en 2030. Esta fábrica significaría la multiplicación de su trabajo y la posibilidad de conquistar nuevos mercados. De esta forma, Grido integra una de las principales compañías surgidas en Córdoba que están en constante crecimiento.