Una familia (compuesta por una pareja y un bebé de 6 meses de vida) fue rescatada y se salvó por casualidad tras haberse intoxicado con monóxido de carbono en una casa de la ciudad cordobesa de Bell Ville.
Ocurrió a las 4 en una casa de calle Urquiza al 100. Un servicio de emergencias trasladó al hospital local a un hombre de 31 años y una mujer de 28, junto con un bebé de 6 meses.
Según la información policial, se habían intoxicado con monóxido dado que habían dejado encendidas una hornalla y el horno de una cocina.
Para evitar estas situaciones, seguir estos consejos:
_No dejar braseros ni artefactos encendidos de noche.
_En los ambientes donde funcione un artefacto para calefaccionar, asegurar una buena ventilación debido a que la llama consume oxígeno. Además, ventilar los ambientes permite la salida del monóxido de carbono.
_Controlar que la llama de los mecheros sea de color azul. Si el color de la misma es amarillo se está produciendo monóxido de carbono. Ante esta situación, apagar el artefacto inmediatamente y revisar el quemador por un gasista matriculado.
_Las reparaciones en los artefactos deben ser realizadas por un gasista matriculado.
_No instalar calefones catalíticos en dormitorios.
_Controlar que el conducto de evacuación al exterior de gases no esté obstruido, abollado o desconectado.
Sobre el monóxido. El monóxido de carbono ocasiona daños en el sistema nervioso central, provocando asfixia y consecuencias irreversibles, y en caso de concentraciones muy altas, puede provocar la muerte de la persona.
Los síntomas de una intoxicación aguda son: confusión, mareos, dolores de cabeza, zumbido de oídos, nauseas, vómitos, palpitaciones, parálisis, convulsiones, coma.
Ante algunos de estos síntomas ventilar inmediatamente los ambientes, tomar aire fresco, apagar los artefactos que pueden provocar la combustión y consultar de manera inmediata a un servicio de emergencia.