La derrota en la Bombonera fue bisagra en la campaña de Talleres, que hasta allí aparecía invicto y hasta con pretensiones de título. También para Guido Herrera, porque con apenas nueve goles defendía el arco menos vencido de la Superliga.
Las tres derrotas seguidas resintieron los números, y aún así Talleres e Independiente son los que menos goles concendieron (15), uno menos que el líder Boca.
A Herrera no lo deja conforme, porque el equipo perdió posiciones y el foco está puesto en volver al triunfo este sábado a las 15.30 frente a Gimnasia y reposicionarse en la recta final para ingresar a Copa Libertadores.
"En lo personal, mantener el nivel es importante pero lo mismo me fui de Rosario con bronca porque perdimos y nos volvieron a convertir dos goles, seis en las últimas tres fechas. No me gusta., hay que bajar ese margen y volver al arco en cero, que era una de las claves del equipo", afirmó Herrera.
Sobre el momento Albiazul, y el tobogán que lo postergó del segundo al quinto puesto, esgrimió: "Nos hacemos cargo, como lo hubiéramos hecho si le ganábamos a Boca y quedábamos a tres puntos. Si no estamos concentrados al 110 por ciento las cosas no nos salen. Tenemos que volver a ser nosotros".
Y a Talleres se le presenta una chance propicia, este sábado a las 15.30 frente a un Gimnasia que también se desdibujó.
"Todos los rivales son complicados, ninguno te la hace fácil. Ganarle a Gimnasia significará sumar confianza porque son todas finales y el objetivo está intacto", aseguró Herrera.
Para el arquero, la merma en el rendimiento de la T no es tan pronunciado. "Contra Independiente hicimos un partidazo. Algo hicimos mal, por eso perdimos. Sí quedamos en deuda con Newell's. Antes estábamos más sólidos en defensa y cerrábamos más rápido los partidos, hay que volver a eso", destacó.
"Seguimos en una linda posición, dentro de los que clasifican para la Copa Libertadores, para hacer historia porque hace poco que Talleres volvió a Primera. Depende de nosotros", finalizó Herrera.
