Para las 20 de este jueves se había convocado en todo el país a un "cacerolazo", contra la decisión de la Justicia nacional de liberar presos en distintas cárceles del país por el riesgo de contagio del coronavirus.
Tal medida generó numerosos rechazos y la manera de expresarlo fue desde los balcones, donde vecinos de Córdoba hicieron escuchar su descontento, como en muchas ciudades y poblaciones de Argentina.
Se transformó en una protesta con alta convocatoria y con repercusión inmediata en redes sociales, sobre todo en Twitter.