Madre, hija y nieta, las "alfajoreras" que deleitan a todos con su receta secreta en la Octavio Pinto

Tres generaciones dedicadas a vender un producto estrella: sus alfajores de maicena. Además, también ofrecen flores en el semáforo antes del puente.

María Ester, Lorena y Katia, tres generaciones de vendedoras de alfajores en la Octavio Pinto. (Creatividad a la Boina)
María Ester, Lorena y Katia, tres generaciones de vendedoras de alfajores en la Octavio Pinto. (Creatividad a la Boina)

Quien haya pasado alguna tarde por Puente Tablada y Octavio Pinto, habrá notado la presencia de estas tres grandes mujeres que sonríen orgullosas mientras ofrecen las rosas más lindas del mundo y los alfajores de maicena más ricos de la historia.

No insisten mucho, porque saben que su producto tienta absolutamente a todos.

María Esther de 60 años, junto a su hija Lorena, declaran a esta esquina como su segundo hogar hace ya 21 años.

Katia, de 21 años, la hija de Lore y nieta de Maria, se incorporó a estas grandes laburantes ambulantes hace cinco años.

Entre todas brindan una receta secreta de alfajores que enamora los paladares de todos los cordobeses de la zona.

"Los alfajores se venden de a tres, y las flores se venden solas", ríen las tres chochas al mismo tiempo.

Las tres le contaron a la página Creatividad a la Boina que las bolsitas contenedoras son transparentes para que se vea bien el producto.

Trabajaban repartiendo volantes hasta que un día se quedaron sin trabajo fijo y tuvieron que tomar la decisión de emprender.

María Esther tiene uno de sus hijos con discapacidad hace unos años, a causa de un accidente, por lo que trabaja más horas que nunca para poder seguir manteniendo su hogar en Villa Urquiza.

Katia por su parte, sueña con tener una pastelería propia y sus alfajores indudablemente ya están a la altura de sus sueños.

Para disfrutar uno mientras volves a tu casa, solo necesitas pasar de 15 a 22 por Puente Tablada.

Para encargos puntuales, Katia deja su celu. 351 623 4282