De las cinco personas que fueron detenidas la semana pasada en el marco del conflicto del transporte urbano, sólo queda un detenido –que no es chofer-, según confirmaron fuentes judiciales.
Por disposición del fiscal Guillermo González habían sido privados de la libertad dos choferes por resistencia a la autoridad, y un particular infiltrado que había generado disturbios.
"Los dos choferes imputados por resistencia a la autoridad recuperaron la libertad entre el miércoles y el jueves, y la otra persona, que era un hombre que estaba como infiltrado agrediendo, continúa privado de la libertad", confirmó González a Día a Día.
La detención de esos conductores se produjo el lunes pasado, en cercanías del Ministerio de Trabajo.
Mientras, por disposición del fiscal Alfredo Villegas, otros dos choferes habían sido detenidos el viernes pasado en la punta de línea de la empresa Ersa, cuando intentaron evitar que saliera un ómnibus.
“Los dos fueron detenidos por resistencia a la autoridad, y uno de ellos también por el artículo 194 que es entorpecimiento de un transporte público”, indicó Villegas. Ambos fueron liberados al día siguiente.
Unificadas. A partir de este lunes 12 de junio, y por disposición del fiscal General Alejandro Moyano, el fiscal Guillermo González será el único encargado de investigar las causas penales que se deriven del conflicto de transporte urbano.