Este jueves, y por pedido de los abogados de la querella, la Fiscalía del Segundo Turno de Villa Carlos Paz arrancó con la toma de muestras de ADN a efectivos policiales que trabajaban en la ciudad en 2015, año en que Andrea Castana fue asesinada en el Cerro de la Cruz.
El objetivo es cruzar los perfiles genéticos con el hallado en el cuerpo de Andrea, en un intento por desentramar un caso que lleva años sin justicia.
Las primeras muestras, parte de un total de 40, fueron recolectadas en la repartición judicial, y abarcan tanto a hombres como mujeres que formaban parte de la fuerza en aquel entonces. Se espera que en los próximos días se terminen de recolectar todas.
Este pedido se fundamenta en una ley que se activó en su momento cuando Córdoba vivía bajo el acecho del violador serial Marcelo Sagen, lo que permitió avanzar en investigaciones complejas mediante el cruce de ADN.
El caso Castana y la pista de un perfil génetico que coincide con otro caso de violencia de género
Andrea Castana fue asesinada el 11 de marzo de 2015 en el Cerro de la Cruz. Tras años de una investigación que no lograba avanzar, en 2022 se produjo un hallazgo clave: el perfil genético encontrado en el cuerpo de Andrea coincidió con el de otro caso de violencia de género registrado en 2004, también en el mismo cerro. Este descubrimiento encendió las alarmas y reveló un posible vínculo con otros tres casos de abuso sexual ocurridos entre 2004 y 2005, con la misma metodología y en el mismo lugar.
El avance en el caso de Castana se basa en un recurso que ya había sido utilizado en Córdoba durante los años más duros del caso del violador serial, cuando la recolección de ADN de personas ligadas a la investigación permitió destrabar varios enigmas.