En la Ciudad de Buenos Aires existe una forma poco conocida de acceder a la casa propia a precios más convenientes que los del mercado: las compras de viviendas que provienen de lo que se denominan "herencias vacantes".
"Las herencias vacantes son aquellos bienes muebles o inmuebles que no tienen herederos legítimos y que, por Ley, pasan a formar parte del patrimonio del Estado para ser destinados a la educación pública", explicó Gabriel Astarloa, procurador general de la Ciudad de Buenos Aires.
Pero para que esos recursos lleguen a la educación, es necesario realizar antes un proceso sucesorio, y un remate público si la herencia no pueda ser utilizada como escuela o establecimiento educativo por su dimensión. Es en ésta instancia del proceso cuando los vecinos puedan comprar su casa a precios más accesibles.
Las subastas, simples y transparentes, se realizan todos los meses en la sede central del Banco Ciudad (Esmeralda 660, piso 3), y se publican en los principales medios masivos de comunicación. En el proceso intervienen la Procuración General porteña, el Ministerio de Educación porteño, y el Banco Ciudad.
Los interesados tendrán una nueva oportunidad este miércoles 20 de septiembre a las 10:30. Para participar, solo se debe asistir el día del remate con un documento de identidad válido. Una vez subastado el bien, la Procuración General se ocupa de que el mismo se encuentre en condiciones para su transferencia, firma el boleto de compra-venta y efectúa el seguimiento del trámite hasta la firma de la escritura y entrega de las llaves al comprador.
