El endurecimiento de la cuarentena en el AMBA es casi un hecho. En la reunión del lunes, el presidente y los mandatarios de la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires acordaron esperar unos días más, pero con los contagios en alza, desde el 29 de junio se volvería atrás varias fases.
El ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, lo confirmó en "Desde el llano" (TN). "Tenemos una cantidad importante de casos, pero la velocidad de crecimiento está relativamente contenida. Sin embargo, en la medida que sigamos creciendo vamos aumentando la ocupación de camas y eso decididamente estresa al sistema (de salud)", comenzó diciendo.
La curva de infectados -que el lunes tocó un pico, con 2146 casos nuevos, 95% de ellos en el AMBA- es donde todas las miradas estarán puestas esta semana, antes de que, el próximo jueves, Alberto se reúna de nuevo con Rodríguez Larreta y Kicillof.
"Estamos trabajando intensamente con el plan Detectar, el testeo sistemático de los trabajadores de la salud y de los geriátricos para bajar los casos. Necesitamos rápidamente cambiar esa tendencia. Si no, vamos a tener que mostrarle los datos a la ciudadanía y pedirle un último esfuerzo para poder pasar esta última parte del pico", reconoció Quirós sobre la situación de la Ciudad.
Desde el Gobierno de Rodríguez Larreta se mostraron siempre a favor de flexibilizar progresivamente la cuarentena, y se habilitaron en CABA más actividades que en Provincia, como la posibilidad de hacer ejercicio por las noches, o de paseos para los menores los fines de semana.
"Está estudiado a nivel internacional que la cuarentena reduce significativamente la transmisión viral, pero no la elimina", sostuvo Quirós, y anticipó que "el final de esta situación va a tener que ver con la aparición de una vacuna" o medicamento contra el COVID-19; con la inmunización de la ciudadanía y, sobre todo, con "cambios de cuidados y de comportamientos sociales que dificulten la transmisión del virus".